Rosé y yo +18 (Blackpink)

Brindemos por el primer show

Eran alrededor de las 2 am. Salimos del cuarto para brindar con las chicas.

Un rosé para Rosé - rió Jisoo pasándole una copa de vino rosa. Jennie me dió otra a mí. Hicimos un brindis y nos sentamos en los sillones de la sala principal.

¿Por qué volvieron tan temprano? pensé que irían a bailar o algo así - les dije.

Estábamos cansadas - respondió rápidamente Jisoo.

No es cierto, Jisoo tomó dos tragos y comenzó a pelear con un espejo, según ella le estaba copiando - me dijo Lisa. Yo reí a más no poder, realmente Jisoo era económica y copa fácil.

Y tuuuuú, y tú... ahhh voy a dormir - se quejó levantándose y marchándose a un cuarto. Todas reímos.

Por cierto, mañana veremos a los señores Manobal - dijo Jennie.

Lisa aplaudió emocionada frente a su cara. Yo aún no conocía a ninguno de los padres de las chicas, solo a mis suegros. En algún momento habíamos hecho videollamada, pero no era lo mismo.

Genial - respondí - tendrán que estar sobrias entonces, vayan a dormir - agregué empinando mi copa hasta el fondo.

Tienes razón cariño - dijo Rosé.

Tiinis rizín cariñi - se burló Lisa parándose para correr. No alcancé a agarrarla, se me escapó antes. Jennie rió y se fue tras de ella.

Nosotras deberíamos... - tosí mirando a Rosé.

...terminar en lo que estábamos? - continuó mi frase - lo siento cariño, ese vino hizo de efecto somnífero y la verdad estoy muerta - agregó bostezando y estirando sus brazos por arriba de su cabeza.

Está bien, vamos a dormir - le respondí decepcionada. Hace días que no podíamos concretar bien nuestros encuentros, siempre pasaba algo y solo una terminaba acabando.

Fuimos a la habitación, nos pusimos las pijamas y volvimos a acostarnos. Rosé se giró para que la abrazara por la espalda y acomodó su trasero en mi entrepierna. Grave error, mi amiguita de abajo se despertó, no aguantaba esas cosas, tenía pensamientos propios. En un rápido movimiento bajé el pantalón de seda de Rosé, la puse boca abajo y me subí en ella. Mi pantalón ya estaba abajo.

Cariño ¿qué haces? - se quejó mientras con una mano apretaba la parte posterior de su cuello contra la almohada.

No puedo... necesito... - le respondí jadeando. Mi expuesto clítoris ya rozaba su majestuoso trasero.

Hazlo rápido - volvió a quejarse. Seguí rozándome, pero no lograba terminar.

No logro venirme - le confesé.

Ok, deja darme vuelta - me respondió. Me levanté un momento y Rosé se puso mirando hacia arriba.

Oooh amor - gemí mientras sentía mi fruto apretarse contra el de ella - esto era lo que necesitaba, abre más - le pedí tomando sus piernas para dejar su intimidad más expuesta.

Continué rozándome contra Rosé hasta que al poco tiempo logré acabar. Me tiré en la cama a su lado con el corazón latiéndome a full.

Lo siento, te dejé toda mojada - le dije pasando mi mano para secarla.

No te preocupes - me respondió subiendo su pantalón. Creo que estaba un poco molesta.