Rosé y yo +18 (Blackpink)

Viaje con covid

Nos dormimos profundamente una al lado de la otra. Su olor me permitía dormir tranquilamente y sin preocupaciones.

La mañana llegó y Lisa entró al cuarto abriendo las cortinas.

Lo siento chicas, Nini me mandó, ardilla debes alistarte - dijo mientras recorría todos los ventanales.

¿Alistarse para qué? - pregunté refregando mis ojos.

Debemos partir al aeropuerto - respondió Lisa. Abrí mis ojos como platos.

Lo había olvidado - dijo Rosé despertando - lo siento amor, no te dije, debo viajar para una promoción.

¿Por cuánto tiempo? - pregunté preocupada.

Cinco días - respondió Lisa caminando hacia la puerta sin darle importancia al asunto.

¿¡Cinco días!? - grité en shock.

Cariño, lo siento, había olvidado que debía viajar... - dijo Rosé.

¿Cómo voy a sobrevivir cinco días sin ti? - reclamé preocupada.

Llamaré a una enfermera para que cuide de ti amor - me respondió.

No quiero una enfermera, te quiero a ti - volví a quejarme. De verdad no podía soportar el hecho de que estaría cuatro noches sin Rosé, no lo creía posible.

Amor... - me dijo.

Iré contigo - le pedí - no puedo estar una noche sin ti, ¿qué voy a hacer con cinco días?.

No puedes viajar, mírate - me dijo agarrando mi quijada con sus manos y besando mi boca - te prometo que pasará volando.

Para ti quizás, para mí será una tortura - dije triste.

Bueno, entonces tendré que darte algo para que no te olvides de mí - me dijo montándose en mi regazo.

Amor, despacio - le dije sintiendo un poco de dolor

Seré cuidadosa -  me respondió bajando mi pijama y también el suyo. Puso su fruto justo arriba del mío y agarre sus caderas con mis manos mientras se mecían suavemente.

No quiero que te vayas - le supliqué jadeando.

Tampoco quiero hacerlo amor - me dijo agachando su cabeza para besarme - pero trabajo es trabajo - agregó tomando aire. Agarré sus caderas e hice fuerza hacia abajo para sentir mejor su palpitante clítoris rozándose con el mío.

Aaaaah cariño... - me gimió.

Te amo... - le jadeé corriéndome. Al segundo Rosé también acabó.

Se levantó y se fue directo a la ducha. Recién volvía a sentir el dolor en mi cuerpo, la excitación había nublado mi sistema nervioso.

Por fin terminan - dijo Jennie entrando al cuarto. La miré con dolor - aquí traigo tus pastillas - agregó acercándomelas junto con un vaso de agua.

¿Es necesario ese viaje? - le pregunté.

Sí, además servirá para que puedas recuperarte, cada vez que estás malherida continuan teniendo sexo y tardas más en curarte - me respondió.

Mi corazón es el que quedará malherido con este viaje - le respondí.

Que exagerada - rió, pero vió mi cara de tristeza y se arrepintió - que no se te ocurra hacer ninguna estupidez en estos días - me advirtió seria agarrando el cuello de mi pijama.

Solo vuelvan pronto - le dije agarrando su mano en mi cuello con los ojos rojos. Me soltó y acarició mi mejilla con una de sus manos.

Estarás bien - me dijo amablemente. En eso Rosé entro de nuevo al cuarto.