La disco y algo más

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Nos arreglamos, golpeamos las puertas de las chicas y bajamos. De a poco empezaron a aparecer para salir a celebrar.

Sabía que las chicas se emborracharían, cada vez que pueden lo hacen, por el nivel de estrés de sus carreras, así que tenía en mente moderarme un poco para poder cuidarlas, al fin y al cabo era mi trabajo, y no podía embriagarme y dejar desprotegida a mi Rosie.

Bien, Nayeon tiene nuestras entradas para esta disco que les comenté - dijo Jennie.

Procuren portarse bien, mañana deben grabar el demo con Jessi - les dije agarrando a Rosé de la cintura.

No me provoques - me susurró. Le sonreí con picardía.

Salimos y entramos a la van. Las chicas se sentaron con sus parejas, Rosé se sentó encima de mí.

¿Quieres provocarme tú ahora? - le dije con mi entrepierna húmeda por sentir su trasero encima.

Un poco - dijo y me besó en los labios. Fue peor, mi temperatura se fue a las nubes.

Hey, no queremos mini Rosies aún - dijo Lisa bromeando. Todas rieron, Rosé paró de besarme para reírse.

No sería tan mala idea - me dijo Rosé al oído. La miré con sorpresa. Nunca habíamos tocado ese tema. Bueno, ni siquiera teníamos algo más formal como para pensar en ese siguiente paso.

Llegamos a la discoteca, entramos por la puerta de atrás para que no molestaran a las chicas. Nayeon estaba ahí esperándonos con las entradas para entrar directo al VIP, lejos de los plebeyos como yo, es decir, gente no famosa.

Nos entregó las entradas y pasamos.

Nos sentamos en los sillones, cada una al lado de su pareja, pedimos unos saint germain con espumante. Procuré beberlo muy lento, pero sin que las chicas lo notaran.

Lisa ya iba en el 4to vaso cuando se dio cuenta de que yo estaba tomando agua en vez de alcohol, pero justo tocaron una canción que le gustaba por lo que Jennie la arrastró para que bailara con ella. La vi alejarse mirándome queriendo, desesperadamente, decirle a las demás lo que sabía. Yo solo me reí.

¿Qué es tan gracioso? - preguntó Rosé.

Lisa en sí me causa demasiada gracia - le respondí bebiendo el último sorbo de agua para que no notara de que no era alcohol - ¿y tú, qué haces? - le pregunté.

Vengo a robarte un rato - me dijo llevándome a bailar.

¿Cuánto has tomado? - le pregunté oliendo su boca.

Lo mismo que tú - respondió aprovechando mi cercanía para besarme. Definitivamente, no habíamos bebido lo mismo, yo únicamente tenía un trago encima, los demás habían sido vasos de agua, pero guardé silencio.

El VIP estaba en el segundo piso y desde abajo no se podía ver nada. Nayeon había elegido especialmente este lugar por eso mismo, podíamos hacer lo que quisiéramos sin miradas ni cámaras de por medio.

Rosé comenzó a bailarme muy pegada a mi cinturón. Yo ya venía con la entrepierna dura desde la van, pero como ella había bebido más que yo, me aguanté.

Acompáñame - me dijo y me arrastró por entremedio de las demás.

Llegamos al baño.

¿Quieres que te afirme la puerta? - le pregunté sonriendo.

Quiero que pases la puerta conmigo - dijo. Me empujó de espaldas contra una de las murallas del baño y me besó agresivamente.

Desde ese día que me hiciste el amor apretando mi cuello he estado pensando en eso - me dijo - me gustó.

Rosé y yo +18 (Blackpink)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora