Rosé y yo +18 (Blackpink)

Bp de gira

Los días pasaron y las chicas ya debían comenzar la gira. El primer concierto sería en Seoul y después viajaríamos por el mundo.

¿Estás bien cariño? - le pregunté a Rosé. La notaba adolorida. Se habían estado esforzando un montón ensayando.

Me duele un poco el cuerpo - me dijo tocándose la nuca - pero estaré bien para mañana, estoy emocionada - agregó dándome una gran sonrisa.

Podría darte un masaje para que te relajaras - le dije acercándome.

Sabemos que eso terminará en sexo - dijo Jennie bajando las escaleras. Nos vió abrazadas en la cocina y rió.

Jennie unnieeee - le gritó riendo. Se dirigió a mí - quizás eso fuera más conveniente - me susurró. Yo solo me reí.

Después de todos los ensayos que han tenido, tener sexo hoy no creo que sea buena idea - le dije y la besé en los labios.

Bro, dejen de toquetearse - dijo Lisa sentándose en el sillón. También venía adolorida.

Deberían tener prohibido coger - añadió Jisoo mientras miraba su celular y se sentaba junto a Lisa.

¿Byul no irá a la gira? - le pregunté.

No, tiene trabajo que hacer - me respondió haciendo un puchero.

Ok chicas, no podemos beber, así que preparé jugos para celebrar nuestro inicio de gira de mañana - dijo Jennie.

Jennie, solo serviste jugo de las botellas de refrigerador - le dije riendo. Jennie me golpeó la nuca con su mano.

Ouch - me quejé sobándome. Las chicas rieron.

Ok, por un buen show, que no se lastimen y vuelvan igual de hermosas y sanas a la vuelta. Haré mi mejor trabajo cuidándolas. Las quiero chicas - les dije subiendo mi copa.

Awwwwww - dijeron todas.

A veces tienes tus momentos - dijo Lisa fingiendo secarse una lágrima. Me reí y le di un golpecito de puño en su hombro.

Prometemos dar toda de nosotras, cuídanos bien - dijo Jennie mirándome. Hicimos un salud, tomamos el jugo de nuestras copas y nos fuimos a nuestras habitaciones.

¿De verdad no me vas a quitar las tensiones hoy? - me preguntó Rosé cruzando los brazos.

Si hacemos algo hoy, mañana no podrás ni levantarte y debemos madrugar - le respondí quitando mi ropa para acostarme.

Y más encima me provocas - me reclamó. Claramente no estaba incitándola, también me sentía cansada. Solo me reí mientras me sentaba en la cama y quitaba mis zapatillas.

Ven aquí - le dije tocando la cama. Me sonrió - te voy a hacer venir, pero todo será suave y rápido.

Le quité la ropa y la acosté en la cama, comencé a tocarla y a besarla hasta que se corrió. En ese mismo instante se durmió. Le regalé una sonrisa, quité mi ropa y me acosté a su lado. Me dormí al rato sintiendo su olor en mis dedos.

La mañana llegó y con ello, el alboroto de la Pink House. Los camarógrafos estaban en la casa grabando a las chicas mientras se arreglaban para irse al estadio. Con Rosé no pudimos tener ningún tipo de acercamiento.

Llegó la van, ayudé a subir las maletas y nos pusimos en marcha. Las chicas iban haciendo un live con Blink, así que tampoco pudimos tener contacto, pero no dejaba de mirarme y enviarme amorosos mensajes a través de su celular.

Llegamos al lugar y las chicas fueron directo a cambiarse de ropa. Yo las cuidaba en todo momento. Lisa me llamó para que las ayudara con la vestimenta.

Rosé necesita que le subas el cierre - me dijo guiñándome un ojo.

Entre al vestidos donde estaba Rosé. Ya tenía su vestido puesto. Estaba apoyada en la mesa de maquillaje. No había nadie más.

Sra. Park, necesito de su tiempo - me dijo cruzada de brazos - estos labios están muy secos - mintió.

¿Cuáles? - le dije mirando su entrepierna. Se acercó a mí y me dió un golpe en el hombro. Me reí y rodeé mis manos por su cintura para besarla.

¿Estarás mirándome y pendiente de mí en todo momento? - me preguntó.

Por supuesto, no sacaré mi vista de ti - le dije con un beso finalmente - no robes muchos corazones ahí arriba.

Rosé rió. Llamaron a la puerta, era Adele.

Rosé, al escenario - dijo a través de la puerta. Rosé me dió el último beso y salimos para dirigirnos a la parte de abajo del escenario.

Suerte chicas - les dije a las cuatro, le guiñé un ojo a Rosé y subí para quedar abajo frente al escenario.

El show transcurrió en orden. Rosé se veía maravillosa arriba cantando y bailando. Los fans le gritaban que la amaban y cosas así y la verdad me daban ganas de lanzarme contra ellos, pero me contenía.

Al terminar, dejaron una canción puesta para que las chicas pudieran salir sin peligro. Tomamos la van y partimos al aeropuerto. El siguiente concierto era en 24 horas en Europa. Las chicas iban exhaustas. Al solo sentarnos en los asientos, se durmieron. Rosé me besó los labios con los ojos cerrados y cayó rendida en mi hombro.

Llegamos a España y nos fuimos directo a un hotel. Las chicas ya habían recuperado un poco de energía con la dormida del avión, pero iban hambrientas.

Entramos a la suite presidencial, donde nos quedábamos las cinco juntas. Pedimos comida y Rosé arrasó con todo. Aún no entendía donde cabía tanto en ese pequeño cuerpo. Después de comer la productora subió para hablar con nosotras.

Deberás quedarte aquí, no puedes acercarte al escenario - me dijo muy seria.

¿Qué, qué pasa? - preguntó Rosé.

Nos llegó el rumor de que Jessi anda por Europa y no podemos arriesgarnos a que te haga algo en el concierto, te quedarás en este hotel mientras la gira dure en este continente - volvió a decir.

Espera Adele, pasado mañana partimos a París... - dijo Rosé con la boca abierta.

Sí, solo ustedes cuatro - respondió Adele - es por tu seguridad - dijo mirándome. Asentí.

Rosé comenzó a llorar desconsoladamente. La llevé a la habitación.

Tranquila amor, nos veremos en el siguiente continente - le dije intentando calmarla.

Pero son cinco países que quería recorrer contigo - dijo aún llorando - y no me siento segura si no estás cerca.

Estaré pendiente de ti en todo momento, lo prometo - le dije abrazándola fuerte para que dejara de llorar. Nos acostamos y nos dormimos sin soltarnos en toda la noche.

Al otro día nos levantamos para desayunar, Rosé no quería despegarse de mí y, la verdad, yo tampoco. Serían cinco días sin ella, hace mucho que no estábamos tanto tiempo separadas.

No hagas nada malo mientras no estoy contigo - me dijo mientras desayunábamos las dos en el cuarto.

¿A qué te refieres? - le pregunté dudosa.

No lo sé, que quieras traer a alguien para satisfacerte o que sé yo... - me dijo seria.

Estás jugando ¿verdad? - le pregunté impactada - ¿crees que meteré a una prostituta mientras no estás? - exclamé, las chicas venían entrando a nuestro cuarto. Jennie me miró feo.

¿Vas a meter a una prostituta mientras Rosé no está? - me rugió Jen. Al parecer solo había escuchado la segunda parte de mi pregunta. Corrió a tirarse encima mío para ahorcarme.

Cálmate Jennie - le gritaba mientras Rosé intentaba quitarla de encima mío.

No Nini, es un mal entendido - le dijo Rosé. Jennie se calmó. Yo tosí tocando mi cuello, esas pequeñas manos tenían fuerza.

Todas nos sentamos ya más tranquilas y arreglamos el malentendido. Rosé se despidió de mi hasta que las chicas la obligaron a subirse a la van para ir al estadio de España para la siguiente presentación.

Te amo - le dije antes que subiera.

Te amo - me respondió con un beso al aire.