When You Cry

20

Feiyu conducía, el sol le lastimaba los ojos y no se atrevía a ponerse detras del volante, su amigo solo estaba desvelado por lo que le tocaba ser el coductor asignado. Yibo estaba medio despierto en el asiento del copiloto, salieron a beber y decidieron esperar el amanecer mientras iban de bar en bar; igual que cuando eran estudiantes universitarios.

-¿Sabes donde esta? -Feiyu queria iniciar la incómoda conversación para terminar con el incómodo silencio.

-Por que no le preguntas a Luo, te aseguro que el supo todo el tiempo su paradero.

Acomodaba sus gafas de sol, sus ojos le ardían.

-Lo dudo, me habría dado cuenta.

-¿Qué me dices de los últimos días?

-Él y mi madre han estado moviendo sus hilos para coseguirme ese papel en Ámerica, ha estado muy ocupado y apenas si conversamos, no he notado nada extraño.

-¿Qué se supone que haga? -esta pregunta era mas para él, no esperaba que nadie le respondiera.

-No lo busques.

-...

-Te lo digo en serio, enfócate en tu empleo y en tu bebé y no en alguien tan insensible que ni siquiera se ha puesto en contacto con su padre.

Hace años, cuando Johnny volvió a China se enteró de inmediato; esto, porque regresó con el rabo entre las patas a rogarle a Zhaolin que unieran fuerzas para poder arrebatarle algo (o mucho) de las acciones de la empresa a los Huang, Johnny se convirtió en el perro de Zhaolin a cambio de ayuda para recuperar la vida que tenía antes de marcharse. Era tan ruin que prefirió vender a su familia a cambio de dinero, no le importó ayudar a Zhaolin a "robar" la mitad del patrimonio que sus ancestros habían acumulado por generaciones.

Su excuñado le dijo a Yibo que no sabía nada de Xiao Zhan, pero que su nuevo socio aseguraba que estaba bien.

Por mucho que rebuscó entre los pasos de Johnny no logró descubrir nada, Feiyu buscó por su cuenta a Xiao Zhan cuando viajaba a Ámerica y tampoco consiguió nada mas que darse por vencido luego de toparse con pared una y otra vez.

-No haré nada.

-¿De verdad? -Feiyu se apresuró a orillar el auto.

-Él decidio marcharse, ahora que volvió sigue sin buscar al tio -siempre tuvo la esperanza de que esto pasara -no lo buscaré, no lo haré, si quiere ver a su padre entonces solo debe hacer la pregunta a la persona indicada.

-¿Sigues creyendo que Yunxi sabe algo?

-Feiyu, Yunxi es mas inteligente de lo que piensas, también es bueno fingiendo que no sabe nada, deja de verlo solo como el hombre que te da placer sexual, ¿sabes?, eres muy afortunado de que este enamorado de ti, si nunca le hubieras correspondido me atreveria a decir que habría encontrado la manera de destruirte

-Gracias por agregar una inseguridad mas a mi lista.

-Si llegas a saber algo no me lo digas, es mejor de este modo.

También tenia miedo de que los Yang empezaran a ponerse duros respecto a las visitas a su bebé si llegaban a enterarse de esto. En el pasado tenía la libertad de andar persiguiendo a Zhan, ahora había dos personas que dependían de él y en quienes debían pensar antes de hacer algo; ni su bebé ni el tio Xiao Yu merecían sufrir por causa de sus caprichos.

-Tio -llegó a casa luego de una noche de ausencia -¿cómo dormiste?

-Bien, ¿por qué preguntas? No es la primera vez que sales de noche