34

237 58 17
                                    

No entendía porque a su bebé le encantaba este juego. Lanzar la pelota y que luego A-Shang fuera por ella, ¿no era igual a jugar con un cachorro? A pesar de que pronto cumpliría un año ya gateaba con mas confianza y fuerza que otros niños de su edad, había dado sus primeros pasos, aunque seguían siendo inestables el pediatra les aseguró que el niño caminaría antes que muchos de sus pequeños pacientes.

-¿Cuándo te mudaras? -giró la cabeza para ver a Yang Yang quien mantenía la vista en un libro de pastas color durazno.

-El próximo mes, las reparaciones aun no estan listas y no quiero que mi hijo sufra algun accidente si me apresuro.

-¿No tiene que ver con querer celebrar la fiesta de su primer cumpleaños aquí, cierto?

-Eso no importa -Yang Yang pasaba la página de manera suave -yo decido donde realizar la fiesta, no importa en donde resida, se ha organizado todo para que se haga en esta casa, es la única que tiene el espacio adecuado.

-¿Por qué no contrataste un salón de eventos?

Le hubiera gustado hablar de su relación con Zhan a Yang Yang antes de la fiesta para que así este pudiera asistir y al fin conociera a su hijo, luego de todo lo que hicieron un día anterior estaba mas que claro que su relación iba por buen camino.

-¿Por qué sonries? -Yang Yang aun sostenía el libro, pero sus ojos ya no estaban sobre el.

Yibo no se percató de la sonrisa enorme que se dibujó en su cara luego de recordar lo mucho que disfruto de hacer el amor con Xiao Zhan.

-No es nada -el bebé había regresado con la pequeña pelota entre sus pequeñas y gordas manos.

-¿Cuándo puedo tener a A-Shang por todo un día?

-Puedes tener un día completo, nada te lo impide.

-Pero no quiero venir a visitarlo en esta casa, me gustaría salir fuera para llevarlo a un lugar diferente, podriamos ir a comer algo con el tio.

La esquina de la página que Yang Yang sostenía se arrugó debido a la presión que sus dedos hicieron sobre ella.

-Pronto llegara el invierno, la primera nevada ya cayó, es peligroso que lleves al bebé fuera.

-No va a enfermarse si lo cubrimos bien.

Le hacía cosquillas en la barriguita, el bebé soltaba balbuceos de pura felicidad.

-¡No!

-Tranquilo -aunque lo dijo el también se estaba alterando.

-¡Solo quieres llevarlo fuera para que esa zorra lo vea, ¿me equivoco?

-¿De qué hablas? -¿Zorra? Sentía que algo no iba bien.

-Zhaolin me dijo que te acuestas con un niña boba, ¡¿acaso quieres que tu amante sea cercana con MI HIJO?!

El bebé no era consiente del ambiente oscuro que se había formado en la habitación, masticaba el colgante de goma que traía sobre su muñeca debido a que las encías le provocaban mucha comezón, unos cuantos dientitos ya adornaban su sonrisa, pero unos cuantos seguían ocultos esperando salir.

-¿Eso es lo que te preocupa?

-Si, y estoy harto de fingir que no, si quieres revolcarte con una cualquiera hazlo, pero no involucres a mi bebé en eso.

-No es una cualquiera.

-¡Claro que lo es! Mira que usar tu cuerpo para conseguir escalar en la sociedad es tan sencillo de hacer que solo personas sin escrupulos y sin educación son capaces de hacerlo, no se esfuerzan lo mas mínimo en conseguir lo que quieren.

When You CryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora