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Se acomodaba el traje elegante, Feiyu entró a la habitación cuando luchaba contra la corbata.

-¿Por qué te ves como de 50 años?, deja de hacer eso -Feiyu le arrebató la corbata para evitar que Yibo le atara un nudo mas a los cien que ya tenía -llegaron la mitad de los invitados y todos preguntan por ti, apresurate y deja de perder el tiempo aquí arriba.

-Xiao Zhan, ¿llegó?

-No, aunque hace un momento llegó el servicio de postres y hay un chico rellenito extremadamente parecido a él.

-¡Ja ja!, se que no lo has visto aún, pero sigue siendo muy delgado -acomodaba aquel reloj que combinaba muy bien con sus gemelos.

-Baja ya, si quieres verlo llegar debes estar allá -Feiyi señaló hacía abajo con sus dedos.

-Esta bien, bajemos -respondía mientras le colocaban de manera adecuada la corbata que lucía un tanto arrugada por la manipulación de antes.

Al descender, al menos 20 personas ya estaban por ahí charlando y divirtiendose, se tomó el tiempo de saludar a todos, cuando creyó haber terminado se dio cuenta que los invitados seguían llegando.

-¿Cuántas invitaciones envió Yunxi?

-Alrededor de 50, no lo se, creo haber escuchado ese número.

-¿No habrá problemas con tus vecinos?

-El hombre de arriba esta en Macao, la chica de abajo esta de vacaciones en Europa, así que relájate.

Quería hacerlo, pero no dejaba de observar la hora, los minutos transcurrían y Xiao Zhan no llegaba.

-Tranquilizate, es normal que las personas se retrasen.

-Ha transcurrido una hora, ya debió de haber llegado.

-Es probable que este nervioso, mira a toda esta gente, seguro se sintió tímido por volver a encontrarse con estos excompañeros de trabajo.

Tal vez era así, estaba a punto de salir a buscarlo cuando Yunxi ingresó al lugar con Yang Yang a su lado.

-¿Qué... -detuvo la frase rápidamente, seria grosero preguntarle aquello a su exesposo -¿y A-Shang?

-No te preocupes, las niñeras estan con él, papá prometió que me llamaria si algo iba mal.

-Me hubiera gustado verlo.

-Este no es un sitio para un pequeño niño, si gustas puedes acompañarme a casa cuando esto termine y pasar la noche ahí.

-Lo pensaré.

-¿Qué debes pensar? -Yang Yang lo miró como si aquella frase no fuera con el tema.

Miró a su ex intrigado -Debo ir con Feiyu, creo que esta hablando tonterías de mi con unos amigos.

Esto no era mentira, sin embargo era la excusa para escapar de ahí, en realidad no le importaba ni un poco lo que Feiyu le dijera a algunos actores con los que trabajó diez años atras.

Por mas que esperó Xiao Zhan jamás apareció, empezó a resignarse cuando se dieron las 12. La fiesta para él terminó un par de horas después, Yang Yang no era bueno lidiando con el alcohol ya que debido a su corazón nunca adquirio resistencia a este, en algun momento Yibo lo vio perder el conocimiento con media lata de cerveza, por lo que tuvo que llevarlo a casa; pesaba mas que la última vez que lo sostuvo de esa manera, con mucha dificultad logró llevarlo en brazos hasta su habitación

Lo depositó sobre la cama y se retiró a la habitación cotigua que pertenecia a su hijo, la niñera estaba medio dormida medio despierta, la envió a dormir con el resto y ocupó la cama que estas niñas utilizaban cuando les tocaba cuidar al bebé; no tenía sueño así que podría alimentar y cambiar los pañales del pequeño a-Shang por lo que restaba de la noche.

When You CryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora