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La luz de día comenzaba a despedirse, las luces del vecindario empezaban a encederse creando un lindo espectaculo que se observaba muy bien desde el ventanal del departamento de Xiao Zhan, Yibo estaba sentado con la espalda recargada sobre la pared y sobre su pecho la mayor parte del cuerpo de Zhan se encontraba descansando, rodeaba con sus brazos a ese delgado y delicado cuerpo, hundiendo su nariz en su cabello, olfateando a fondo, intentando percibir sus aromas ocultos.

-Detente, ya me di un baño, pero sigue siendo incómodo, ¿acaso eres un perro para ir olfateando todo? No es educado

-Antes era un gato, ¿y ahora soybun perro? Me gusta abrazarte, acariciarte... -usaba sus manos para tocar aquí y allá, cuidando mucho que sus manos no llegaran al vientre -Deberias disfrutar en lugar de quejarte.

-¿Por qué le pediste al viejo que se fuera?

-¿Estabas escuchando?

-Si, ¿vas a contarme?

-Quería un tiempo a solas contigo.

-¿Estas enfermo? -Zhan giró su cuerpo dentro del abrazo para quedar frente a él, tocó ambas mejillas con sus pequeñas manos -¿un resfriado?

-¿Por qué piensas que estoy enfermo?

-La bolsa que llegó contigo tiene el logo de una farmacia.

-La verdad es que olvidé tus flores porque pasé antes a la farmacia, pero estoy bien, no estoy enfermo.

-¿Seguro?

Aprovechando la posición no perdió el tiempo y empezó a acariciar la espalda, bajando lentamente hacía las piernas, deteniendose en las nalgas.

-Mañana traere el triple de rosas que de costumbre como compensación.

-Esta bien, creo que la gente piensa que he de tener un serio problema con acumular floreros.

La casa estaba llena de flores frescas y marchitas, Xiao Zhan no se deshacia de ni una sola flor que habia llegado a sus manos por parte de Yibo, incluso guardaba los pétalos secos y los mezclaba con aceites arómaticos y algunos cítricos deshidratados para ambientar la casa.

-Me gusta que aprecies las cosas que te doy.

-Son costosas, y tirarlas seria un crimen.

-¿Solo las conservas porque son costosas? -acercó mas a Zhan hacía su cuerpo, quería estar aun mas pegado a él.

-Y también por que son un regalo de tu parte, ¿estas feliz?

Claro que lo estaba, sentía que le ofrecia nada de lo mucho que se merecía, y aun así Zhan cuidaba esos pequeños detalles como si se trataran de joyas.

-Escucha, fui al médico mas temprano porque he estado sintiendome extraño.

-Dijiste que no estabas enfermo -escuchó cierto tono de reclamo.

-No lo estoy, el día de ayer tomaron una muestra de sangre para checar que todo estuviera bien, y no hay nada en mi cuerpo que justifique el como me he sentido.

-¿Por qué no lo mencionaste antes?

-No queria preocuparte, pero descuida, estoy bien, el doctor piensa que tengo un síndrome.

-¿No es algo serio?

-Estoy presentando los síntomas de embarazo, en realidad es incómodo pero nada de seriedad.

Al decir esto el color del rostro de Xiao Zhan se volvió un blanco espectral.

-¿Sín... qué? -su cara era tan cómica ahora.

When You CryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora