When You Cry

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ADVERTENCIA: Este capítulo incluye algunos contenidos inapropiafos y puede causar incómodidad a algunos lectores. Se recomienda discreción.

-Esto es malo, primero fue el loco que cometía actos ilícitos en nuestros predios y ahora, este problema sobre las propiedades con mas de un dueño, no pudo creer la incopetencia de nuestros empleados.

-Lo lamento señor Jun, pero no puedo ayudarlo esta vez, le prometí a mi esposo que llegaría temprano todos los días, el problema del traficante se llevó un montón de horas de cálidad con mi familia.

-Entiendo -su jefe se mostró comprensivo -has hecho mas por esta compañía que cualquiera, es solo que no cofió en nadie mas para resolver este asunto.

-Creame que lo sé, pero esto ni siquiera ocurrió en mi departamento, no fueron mis agentes lo que compraron departamentos en codiciones sospechosas, debe hacer que los responsables arreglen su error de lo contrario nunca aprenderan.

-¡No aprenderan nada porque voy a deshacerme de todos ellos!, no me importa desaparecer a todo el piso.

-¿Sera correcto despedir a todo el piso? Son al menos 30 enpleados, si lo hace solo va a complicar todo para el resto, tendriamos mas trabajo en las manos debido a la falta de esos agentes.

-¿Qué es lo que harias tú?

-Despediría a los dos responsables y a su jefe directo, finalment, fue él quien autorizó la compra de estos departamentos con documentos falsos.

-Siempre piensas mejor las cosas que este viejo.

-Jefe, no lo hace por falta de experiencia, esta cansado luego de tantos años de servir en la compañía, si mis consejos son de ayuda siempre podrá contar conmigo, pero no me obligue a trabajar horas extras, mis hijos estan en pleno desarrollo, debo estar presente en sus vidas, no puedo descuidarlos, de lo contrario, me convertiré en un padre ausente.

-Esta bien, puedes irte a casa en cuanto termines tus pendientes, intentaré hacerme cargo del problema con los otros gerentes.

Despidió a su jefe y, en cuanto este se marchó de su oficina, revisó el mensaje de Liying que le envió justo cuando mantenía la conversación con el señor Jun. En pocos carácteres, le avisaba que Xiao Zhan y Shi Shi pasarian la noche en su casa, había organizado una fiesta de pijama para los nietos de su esposo y sus dos hijos estaban invitados.

Algo no estaba bien.

Llamó enseguida a Zhan y este no respondió el teléfono, este ni siquiera estaba encendido. Los pitidos constantes indicaban que el aparato estaba sin bateria o apagado. Llamó a Liying para pedir mas detalles de la fiesta y esta tampoco respondió; su corazón se apretó y un malestar le invadió el cuerpo.

Todo estaba mal.

Salió directo a casa de su hermana, esperaba no tener problemas en su trabajo al salir antes, en realidad, faltaba poco menos de una hora para que se diera su hora habitual de salida.

En cuanto el mayordomo de su hermana abrió la puerta, sintio que todo era muy sospechoso, el hombre estaba evasivo con él.

-¿Por qué no puedo pasar?

-Lo lamento señor Wang, no hay nadie en casa y la señora Liying me ha ordenado que prohíba la entrada a cualquier extraño.

-Pero no soy un extraño, soy su hermano.

-Lo entiendo, pero...

-Dijo que habría una fiesta de pijamas, ¿por qué no hay nadie? ¿se celebraría en otro sitio?

-No... no se nada sobre una fiesta de pijama.

-¿Hay alguien en casa? -su voz y actitud se endurecieron.