La cena iba bien, tan bien que no dejábamos de sonreír.
Y sí, como bien había predicho Alice, los demás clientes nos miraban sorprendidos por la cantidad de comida que venía a la mesa. A ver, que habíamos pedido los solomillos y las costillas, además del plato del día para probarlo y el postre, con el que estábamos ahora. Tampoco era tanta comida, para nosotros, claro.
–¿Puedo probar la tarta de queso? – Le pregunté señalando su plato con la cuchara.
–Cuando la he pedido has dicho que la tarta de queso no te gustaba mucho. – Dijo dando otra cucharada para llevársela a la boca.
–¿Eso qué tiene que ver con probarla? Tal vez esa me guste...
Jake rió a punto de atragantarse.
–¿Me darás de tu tarta de chocolate? – Preguntó tras dar un trago de agua. – Será un intercambio justo.
–¡Solo me queda una cucharada! – Exclamé haciendo un puchero. – Además, tu porción era más grande.
Jake llenó su cuchara con un poco de su tarta y la llevó hacia mí. Sonreí antes de acercarme y comer ese pequeño trozo.
–Ahora tengo que darte por obligación de mi postre. – Dije relamiéndome los labios.
–Termínatelo anda, así pagamos la cuenta y vamos al cine. – Dijo Jacob negando y siguiendo con su plato.
–No, toma. – Mi última cucharada la levanté para que se la comiera él, pero negó. – La estrellaré en tu boca...
Ante mi amenaza, Jacob levantó una ceja, pero se acercó a la cuchara comiéndose la mitad de lo que había. Me quedé como embelesada mientras Jake se relamía los labios en los que se había quedado un poco de chocolate. Él sonrió divertido cuando se dio cuenta antes de susurrar:
–El resto es tuyo, gatita.
....
Miré por encima de mi hombro mientras caminábamos hacia el cine, tenía la sensación de que nos miraban. Y eso me ponía un poco nerviosa, pero nadie había llamado a Jake, así que debían ser alucinaciones mías.
No veía a nadie mirándonos, ni olía a alguien fuera de lugar. No olía a ningún vampiro, ni lobo, ni... ni jaguar.
–No te han mandado ningún mensaje, ¿verdad? – Le pregunté por si acaso.
–Ni llamadas ni mensajes. – Me aseguró Jacob. – ¿Por qué lo preguntas?
–No sé, es como si nos miraran... – Murmuré mirando de nuevo alrededor, intentando ver algo extraño, pero nada.
Jake me hizo detenerme cuando llegamos frente al cine, para quedarnos fuera.
–Si quieres volvemos ya hacia Forks y nos olvidamos del cine por esta vez. – Dijo preocupado por mí.
–No, me apetece ver una película. – Le dije tirando de su mano para entrar. – Hace muchísimo que no vengo al cine y que mejor que contigo, ¿no crees?
Le di un beso antes de guiarle hacia la taquilla para comprar las entradas de película que fuera a empezar primero, me daba lo mismo de qué tratara o el género que fuera.
Resultó ser una película de acción sobre carreras de coches ilegales o algo así, no le presté atención en realidad. Me pasé la hora y media mirando el perfil de Jake mientras disfrutaba de la película, con mi mano entrelazada con la suya. Con tenerle a mi lado tenía suficiente, estaba más que demostrado.
Pasara lo que pasara, tenía claro que haría todo lo posible por estar con él. Ya me había interpuesto entre él y otro lobo, así que podría hacer cualquier otra cosa.
Eso me hizo pensar en el mensaje de Asher, si Matthew utilizaba su voz alfa con él para averiguar dónde estaba... Solo sabía que lucharía contra él si intentaba alejarme de Jake. Ya no era mi alfa, no tenía poder sobre mí y mi vida.
–Alexa... – Susurró Jacob a mi lado, haciendo que saliera de mi estupor. – La película ha terminado.
Miré la pantalla, donde salían los créditos, y como la gente salía de la sala.
–Perdona, me he quedado pensando en mis cosas.
Jacob se levantó, tirando de mí y tomando su chaqueta y la mía, para después salir.
–Deberíamos haber dejado la película para otra ocasión, ¿verdad? – Preguntó colocándome mi chaqueta sobre mis hombros antes de salir fuera a la calle. – He notado tu mirada en mí durante todo el tiempo.
–Bueno, puede que no le haya prestado atención a la pantalla, pero ha estado bien ver como tú estabas metido de lleno en la película.
Jacob rodó los ojos, pero tenía una sonrisa en el rostro que me hizo darle un beso antes de seguir hacia su moto.
Pero había un pequeño problema, mientras caminábamos hacia la motocicleta, la sensación de que nos observaban volvió. No lo había notado mientras estábamos dentro del cine, pero al salir ahí estaba de nuevo. Y no había nadie que nos estuviera mirando en realidad, ¿sería esa preocupación la que me hacía tener esa sensación?
–Es noche cerrada. – Comentó Jake cuando llegamos a la moto, tendiéndome una mano. – Me sé mejor la carretera para volver, así que conduzco yo.
Asentí, devolviéndole las llaves.
–Ve con cuidado, no hay prisa para llegar. – Le pedí antes de darle un beso.
Me subí detrás de él, abrazándome con fuerza a su cuerpo y Jacob arrancó, poniendo rumbo de vuelta a Forks.
Casi todo era oscuridad a nuestro alrededor por la carretera, exceptuando lo que iluminaba las luces de la motocicleta.
Pero en mitad del camino lo sentí, había algo que nos seguía. Al mirar hacia atrás logré distinguir una camioneta con las luces apagadas, que se acercaba cada vez más. Me tensé al darme cuenta de que nos estaba siguiendo y llevaba las luces apagadas para que no lo notáramos.
–¡Jake, acelera! – Exclamé, por suerte me escuchó y lo hizo.
La vibración en la chaqueta de Jacob nos indicó que le estaban llamando, pero no podíamos contestar. Si Alice había visto algo de lo que estaba pasando o a punto de pasar, solo deseaba que fuera lo suficiente para venir a buscarnos, para saber donde hacerlo.
Miré de nuevo hacia atrás, estaba a punto de alcanzarnos.
–¡Nos está alcanzando!
–¡Un poco más adelante hay un camino de tierra, saldré para perderle! – Me informó Jacob, acelerando cuanto podía.
Pero nos alcanzó por detrás. El golpe hizo que Jacob perdiera un poco el control de la moto, pero logró continuar. Me apreté contra él más todavía.
–¡¡Alexa, no te sueltes!!
La camioneta empezó a colocarse a nuestro lado antes de volver a darnos...
–¡¡Jake!!
–¡¡Alexa!!
La motocicleta se salió de la carretera...
Dejé de sentir mis brazos a su alrededor, luego noté como rodé por la tierra, clavándome piedras y ramas hasta que mi cuerpo golpeó con fuerza contra un árbol.
Mi visión estaba borrosa, pero mi oído me indicó que la camioneta había frenado. Alguien se acercó a mí, pero a pesar del olor a sangre que me rodeaba supe quien era.
Antes de poder moverme y hacer algo, sentí un pinchazo en mi cuello. Todo se volvió negro a mi alrededor.
–Jake...
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Garras y Colmillos (Jacob Black)
Fanfiction"𝐶𝑜𝑟𝑟𝑒 𝑦 𝑎𝑙𝑒́𝑗𝑎𝑡𝑒. 𝐶𝑜𝑟𝑟𝑒 𝑙𝑜 𝑚𝑎́𝑠 𝑙𝑒𝑗𝑜𝑠 𝑞𝑢𝑒 𝑝𝑢𝑒𝑑𝑎𝑠." Eso fue lo único que me repetía a mí misma mientras me alejaba de mi vida, de mi problema, de mi familia. Hasta que me encontré con él. Siempre pensé que el des...