Garras y Colmillos (Jacob Black)

Cap. 48 - Visita no prevista

“Vampiros que no han sido invitados.” Nos dijimos Jacob y yo a la vez al sentir que el otro también había cambiado.

“Los estoy siguiendo con los nuevos miembros de la manada.” Me dijo y vi a través de nuestra conexión que eran dos.

“Intenta atraerlos hacia mí, les tomaré por sorpresa.” Le dije viendo más o menos por donde venían.

Me agazapé sobre una roca a una buena altura de un desnivel, viendo entre el hueco de un árbol como venían en mi dirección. Jacob estaba a punto de alcanzar al vampiro rubio cuando se subieron a los árboles.

“Se están burlando de ti, Jake.” Le dije molesta viendo como saltaban de un árbol a otro en círculo mientras mi lobo les seguía con la mirada gruñendo.

“No se burlarán cuando nuestras mandíbulas estén apretando sus cuellos.” Señaló molesto a lo que le di la razón, hasta que los tres cachorros con los que estaba llegaron y se lo llevaron por delante.

“Vas a tener que enseñar a esos cachorros a correr en grupo.” Le dije intentando no descubrir mi posición ante el gruñido que quería salir de mí al escuchar a los dos vampiros reírse de lo sucedido.

–¡Whoppa! – Exclamó uno de los vampiros cuando saltaron de los árboles justo frente a mí, aterrizando de pie sin perder de vista a los lobos.

“Quien ríe el último ríe mejor, ¿no?” Gruñó Jacob mostrándoles los dientes e intentando no mirar en mi dirección.

Me preparé para sorprenderles al ver que se sentaban mientras el rubio silbaba y llamaba a los lobos de forma burlona, pero me esperé al sentir que me habían estado siguiendo y por la derecha de los lobos aparecía Carlisle seguido de algunos vampiros más. Carlisle, Edward, Bella, Eleazar, Tanya, Kate y Garrett.

–Vladimir, Stefan, estáis muy lejos de vuestra casa. – Les dijo Carlisle a los intrusos, así que al menos les conocía.

Más que a muerto putrefacto, estos olían como a momias disecadas, por lo que probablemente eran los más viejos de todos.

“No sé si reírme con la comparación que has hecho de Drácula al cuadrado y las momias.” Comentó Jake. “Si nos los tenemos que cargar, encárgate del moreno y haz que el rubio se caiga de culo frente a mí.”

“Sin problema.” Le dije mirando fijamente las espaldas de ambos vampiros.

–¿Qué les trae por aquí? – Le preguntó Kate a Eleazar.

–Hemos oído que los Vulturi van a ir a por vosotros. – Habló el rubio, por su acento rumano era probable que eso de Drácula fuera acertado. ¿Serían los que hicieron aparecer la leyenda de los vampiros en Rumanía? – Pero que no estaréis solos.

–Nos acusan de algo que no hemos hecho. – Les informó Carlisle.

–Nos da igual lo que hayáis hecho, Carlisle. – Dijo el Drácula rubio, como si eso no fuera importante.

Si estaban centrados en los demás, no me sería difícil moverme hasta estar justo detrás de ellos, gruñirles mientras muestro mis colmillos... ¿Asustar a un chupa-sangre sería posible?

“Espera un poco más, gatita. A ver que más saben de los Vulturi.” Me pidió Jacob.

“Bien, pero que alguien me dé luz verde para al menos darles un buen susto.” Dije mirando a Edward, quien al momento intercambió miradas con Garrett.

–Hemos esperado un milenio para que alguien desafiara a esa escoria italiana. – Siguió el Drácula moreno.

“Están aquí por venganza, lo más seguro es que ellos manejaran el cotarro vampírico antes que los Vulturi.” Deducí con sus palabras, un casi imperceptible asentimiento por parte de Edward me sirvió de confirmación.