“Lo que necesitas es un amigo de confianza. Debe ser alguien capaz de controlar sus propios deseos. Debe ser alguien que no esté interesado en el poder político, la fama, la riqueza o el deseo sexual, y que elija la voluntad de Dios ante la ley de los humanos.”
Jōtarō abrió los ojos, despertándose abruptamente tras tener el mismo sueño que solía atormentarlo desde que leyó el contenido del diario de Dio. Siempre que esas palabras grabadas en la mente se manifestaban durante su sueño, no podía más y despertaba sudoroso, jadeando como si hubiera corrido varios maratones.
Tras notar que estaba en su habitación acostado en la enorme cama que era mucho más cómoda que la antigua, en la que sus pies ahora cabían sin ningún problema, solo suspiró mientras se limpiaba el sudor de la frente con su antebrazo. Había recuperado la tranquilidad, pero volvió a ponerse alerta cuando sintió algo debajo de él moviéndose.
Al retirar las sábanas, vio que se trataba de una somnolienta Koneko frotándose sus ojos, que sin importarle nada, volvió a acurrucarse en él y volver a dormir.
Jojo ya se había acostumbrado a ese tipo de situaciones en el que no estuviera a solas en su cama, por lo que solo lo dejó pasar y prefirió volver a retomar el sueño que le fue arrebatado a causa de esos horribles recuerdos. Sin embargo, antes de hacer algo, vio a Rias sentada en el borde de la cama sosteniendo varias cartas en sus manos.
—¿Qué son esas cartas? —preguntó Jōtarō.
—La persona que las envió fue Diodora Astaroth. Parece que como si fueran cartas de amor, aparte de que hay entradas para el cine, invitaciones para cenar y cupones de productos. También envió demasiados regalos que están afuera de la casa. ¿Cuántas veces ha pasado esto hasta ahora?
—Ese idiota en verdad es muy molesto.
Habían pasado dos semanas desde que habían llegado de sus vacaciones en el inframundo y también de que Diodora Astaroth, uno de los jóvenes demonios que habían conocido en una fiesta, comenzó a intentar cortejar a Asia quien lo había sanado en el pasado.
También después de terminar las vacaciones, un nuevo semestre comenzaba para todos los estudiantes de la academia Kuoh, incluyendo al joven Jōtarō Kūjō, que no tenía problema alguno para mantener su buen rendimiento escolar pese a tener que trabajar todas las noches como demonio.
El muchacho estaba en su salón de clases, con la cabeza apoyada sobre la banca de su pupitre ignorando todo a su alrededor. Trataba de mantenerse relajado, pero los gritos de todos los estudiantes masculinos al hacerse el anuncio de que una nueva estudiante se iba a transferir con ellos lo irritó como nunca antes. Lo mismo era con las chicas, pues a ellas siempre les gustaba que una más se uniera a su círculo.
—Eh, es inusual que sea en esta época del año, pero una nueva estudiante se unirá a nosotros —anunció el profesor también desconcertado por la noticia, pero sin mas, la dejó pasar—. Adelante.
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Star Dragon
FanficDesde que Jotaro Kujo despertó su habilidad Stand, su vida fue condenada por el destino a no volver a ser la misma. Primero comenzando por encaminarse a un largo viaje de cincuenta días por todo el mundo con el fin de salvar la vida de su madre, y g...