CAOS ☆ Beny Jr

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Ya no puedo amar sin mirar atrás...

BENY;

Tengo sus recuerdos marcados en mi piel, y acepto que nunca la voy a olvidar. Literalmente estaré si hace falta media vida así.

Me hice como un mejor amigo de Effy, ya que escuché su nombre salir por los labios de Nahara y me parecía sospechoso, aún recuerdo esa promesa. Ya es hora de hablarle de esto a Effy.

—Effy—Me acerco corriendo a ella.

—No esperaba verte por aquí—Guarda sus manos en los bolsillos de su pantalón.

—Le he preguntado a tu madre porque no estabas en tu casa—Suspiro con delicadeza.

—Ya sé el porqué estás aquí, no hace falta que digas nada.

—¿Cómo?

—Nahara, ¿verdad? Sólo para eso me buscas, quieres respuestas y sobretodo venganza—Sigue caminando a paso rápido, sin mirarme.

—Eso es-

Me corta la frase.

—Ten—Saca algo de su bolsillo y me pega en el pecho junto al objeto, con rabia.

Lo agarro antes de que se caiga.

—¿Una jodida cámara? ¿De que siglo?

—¿No que querías saber más sobre el tema? Conmigo no cuentes—Me mira por primera vez en todo el camino y se marcha.

¿Cómo mierda funciona esto?
Puedo ver archivos de varios vídeos, pero hay muy pocos. En la primera portada sale Nahara con los ojos vendados con una tela negra, como la última vez que la vi con vida.

—Nahara, querida—Una mano se posa en su mejilla.

—No me toques, hijo de puta—Quiso morderle la mano pero él fue más rápido y la aparta.

—Ten cuidado con ese lenguaje. Quiero que me respondas las preguntas que te haré.

—Te las va a responder la puta de tu hermana—Levanta la cabeza a su dirección.

Sólo se ve Nahara en el vídeo, no puedo ver pistas sobre el capullo.

—A mi hermana no la nombres, no la soporto.

—¿Estás grabando, verdad?

Él hace con la boca un sonido de afirmación.

—Beny, escúchame. Búscala hasta encontrarla, no la dejes ir. Sácale todo lo que puedas—Nahara no pudo seguir hablando, ya que se había llevado una patada.

—Es imposible que el supuesto amor de tu vida vea esto, pero ¿que más le dirías a él? Jaja, ¿Que lo amas? ¿Que lo vas a extrañar?—La agarra de la barbilla—Vamos, toca responder.

La suelta y ella agacha la cabeza.

—Dime... ¿Que es de tu padre?

—No lo sé—El tipo se acera y le da otra patada.

Entrecierro los ojos para no tener que ver esta dolorosa escena.

—Habla.

—No recuerdo nada, aunque si lo llegara a recordar tampoco te lo diría.

Él empieza a insultarle y pegarle unas cuantas veces así que quito el vídeo rápido para no tener que ver eso de nuevo.

Le di "click" al vídeo anterior, en la portada puedo verla a ella con una guitarra eléctrica.

—Emm, soy Nahara y... cantaré una canción con mi nueva guitarra—Ríe con nerviosismo—Esto... Bien, voy a empezar con una canción de un cantante que escucho bastante, y que me ha marcado mucho.

Empieza a tocar las cuerdas del instrumento a un ritmo que se me hace conocido mientras cierra los ojos.

—Yo no soy su novio
Ni pretendo serlo, pero me muerdo
Y cuando la agobio
Dice no me acuerdo, que no estoy cuerdo
Y se ve que es obvio
Qué tú quieres, es obvio.

Su respiración se agita. Abre los ojos, y mira a la cámara.

—No canto baladas pero te rimo aquí en mi cama
Con tu vestido me dan ganas
Para sus amigas somos panas
¿Por qué me reclama? Dice que odia ella ahora mi fama
Dice que la gente difama
Y yo solo en busca de lana.

Una lágrima cae por su mejilla.

—Me dice: "¿Por qué eres así?"
A veces quiero cambiar...—Suelta un sollozo, eso hizo que se acerque a la cámara y la apague.

Justo ahí se corta la grabación.

Me quedo parado, sorprendido de haberla escuchado cantar una de mis canciones, además con tanto sentimiento.