CAOS ☆ Beny Jr

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Todos tus gritos me llenan el alma...

Temporada 2.

BENY;

Hace mínimo diez minutos me había despertado. Ya es de día, la luz del sol entra por las ventanas rotas. No puedo apartar mi mirada de Nahara: está acurrucada en mi pecho, impidiéndome ver su rostro angelical, solo deja a la vista su pelo lacio revuelto. Estoy rodeado por sus cortos brazos, haciendo una leve presión con ellos. Tiene puesta una camiseta de tirantes algo corta, ya que se le veía el ombligo, de color negro, junto con unos pantalones bastante cortos del mismo color. Unos calcetines blancos altos cubren sus pequeños píes. Tiene la respiración pesada, hizo que sonriera sin yo pensarlo.

Su teléfono empieza a vibrar encima de la mesita. Estiro mi brazo lo máximo que puedo y atiendo a la llamada.

—¿Quién es?—Mi voz ronca resuena por la habitación.

—¿Se encuentra Nahara Kürten?—Frunzo el ceño y poso mi mirada en ella. Empiezo a hacerle mimos en el pelo.

—Soy su novio, ¿quién le llama?—La curiosidad me invadía por completo, y tuve que mentir para saberlo.

—Llamamos de la morgue, necesitamos que Nahara venga para confirmar que el cuerpo que tenemos aquí es el de su madre.

Por un momento se me fue el aliento. ¿Morgue? ¿Agatha está... muerta?

—Claro, ahora mismo le aviso. ¿Podría pasarme la dirección?

Me pasó la calle y colgué.
Me quedo con su móvil en mi mano, pensando en cómo cojones puede estar Agatha muerta y no nos hayan dicho nada antes. Nahara está refregándose sus ojos con sus delicados dedos.

—¿Que haces con mi móvil?—Se acomoda en la cama, habiendo esta vez más espacio personal.

—¿No me das los buenos días primero?—Dije con un tono de burla—Llamaron de la morgue.

Ella me mira confusa.

—Quieren que vayas para que confirmes que tienen en cuerpo de tu madre.

Su cuerpo se tensa, sus ojos se abren como platos, a la par de sus labios.

—Imposible—Se levanta de la cama y me arrebata su móvil de mis manos.

Marca a un número y lo pega a su oreja.

—No me atiende el teléfono—Su mano empieza a temblar, al igual que su labio inferior, con su móvil aún pegado a su oído—Lo tiene apagado.