Tan relajante...
Tan tibio...
Tan suave y cómodo.
Mis emociones calmadas y mis pensamientos concisos me llevan a disfrutar de este periodo de relajación.
¿Cómo fue?
No recuerdo, no importa, estoy soñando.
Soñando con grandes nubes debajo de mí, sustituyendo el duro suelo, un aire prístino y Michi persiguiendo diminutos Ángeles con gracia.
Poco pueden hacer para escapar de él, solo está jugando. Las chicas y yo reímos al verlo; Mavis a mi izquierda, Avelin a la derecha e incluso Osi se encuentra recostada con la cabeza sobre mis piernas, como si las nubes no fueran ya lo bastante cómodas.
Tan apacible... Si esto fuera posible. Aunque lo único que desentona es ver a Bedelina y a Medelin como una pareja amorosa.
Si eso fuera posible.
—Erika —y la calmada voz misteriosa llamándome—. Erika, ya despierta —tan maternal—. Vamos, Erika, abre los ojos.
Y obligada por la voz, desperté somnolienta y algo aturdida, pero reconocí la sensación del agua caliente a mi alrededor.
Me tallé los ojos con el agua escurriendo de mis manos y eché un vistazo hasta que de nuevo aquella voz me llamó.
—Erika... Sé que la relación maestra alumna debe ser cercana, pero ¿no crees que te estás tomando mucha confianza ahora? —seguí la voz hasta notar a la directora, en cuyo hombro me estaba recargando mientras descansabamos en la gran piscina de agua tibia dentro del baño.
—Di... Directora... yo... como… pero...
—Y volvemos a tartamudear ¿quieres poner en orden tu cabeza y completar alguna pregunta?
—¿Por... por qué me quedé dormida?
—Imagino que estabas cansada —se encogió de hombros dándome una respuesta obvia.
—No... Quiero decir… —recordando, tras el baño la directora "sugirió" entrar al agua para relajarnos, ya que esta era de mejor calidad que la que se usaba en la escuela y justificaba la piel tan tersa y sana de los Elfos, suavizaba los músculos y liberaba la tensión.
En combinación con el olor a hierbas, podría contribuir mucho a la relajación de personas tensas.
La directora me hizo sentarme junto a ella, así que con el agua arriba del pecho, tuve que escucharla hablar sobre mis estudios y como no debía descuidarlos pese a estar de viaje.
De pronto me empezó a entrar mucho sueño y...
Y no recuerdo más.
—¿Por qué no dijo nada cuando empecé a quedarme dormida? —finalmente formulé mi pregunta.
—Parecías cansada, así que te dejé cerrar los ojos y terminaste recargandote en mi hombro.
—Ya... Ya veo —¡¿cómo fui a hacer eso?! Ahora me quería morir de la vergüenza.
—De cualquier modo, ya pasó un rato de eso, estar tanto tiempo en el agua caliente hace daño, así que vamos saliendo —ella se puso de pie sin más aviso y su... quedó frente a mis... ahora tenía más vergüenza por lo que estaba viendo.
—Vamos, Erika —insistió y salió de la piscina.
Casi enseguida descubrí que una de las tareas de una aprendiz es también asistir a su maestra, así que tuve que ayudarla a secarse brazos y piernas y... y ella hizo lo mismo conmigo antes de ponernos una bata y salir.
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Transferida a una Escuela de Brujas Tomo II
FantasyContinuamos con las desventuras de Erika y sus amigas tras la caída de la secta de Ginebra. Veremos a nuevos personajes, nuevas situaciones tan excéntricas como solo podrían ser al estar involucradas las brujas y aventuras que pondrán a Erika en sit...