Estrategia Equivocada

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Y es viernes, saben lo que significa?

Eris —¿otro fin de semana sin tener con quién salir?

¡No!... no...

Es viernes... de brujas...

Disfruten...

*C va a llorar*

La hora de la verdad, le probaría a mi hermana y a mamá que no era un fracaso, que podían confiar en mí.

Tuve mis dudas desde la plática, pero... pero necesito que me vean...creo, ¿realmente es tan malo ser invisible?

No, no, no, Avie, ya estás aquí, no puedes echarte para atrás.

—¡Avelin! ¡no te retrases! —la directora me llamó la atención, así que corrí por el pasillo hacia el cuarto de preparaciones con mis demás compañeras.

Un grupo de cuatro personas me recibió, el juego de esta vez "La cacería de las brujas".

A una de nosotras se le daría una muñeca que llevaría colgando de algún lado, no podía guardarla o esconderla. El resto la defenderían a toda costa mientras trataban de robar la muñeca del equipo rival para traerla a nuestro campamento y quemarla en la hoguera.

El juego era claro, todas mis compañeras tenían atributos especiales, ya sea que fueran buenas en combate o tuvieran mucha resistencia, eran un equipo capaz; yo me uní a ellas porque me movía bien en la naturaleza.

Fue así que formulé mi plan.

—Entonces Avelin, como una Finix, debes tener muchos conocimientos en este tipo de juegos, ¿no? —preguntó una.

—Sí, escuché que una de tus hermanas arrasó en esta competencia hace dos años. Seguro te compartió algunas de sus estrategias, ¿no?

—Algo así... —respondí tímida, pero no, no estaba bien, tenían que reconocerme por mí, no por ellas—. Tengo... algunas ideas.

—No sé, yo también vengo de una familia con prestigio, ¿saben? jugaba mucho esto desde que era niña —respondió otra bruja, de figura esbelta y muy lindos rizos dorados, era... Lucerna.

—Podrían te abajar juntas —mencionó otra.

—Por Lucifer, eso sería maravilloso, ustedes dos nos llevarán a la victoria.

—Bueno... supongo que podemos intentarlo —mencionó Lucerna.

Me adelanté y apoyé las manos sobre la mesa, allí se nos había dejado una marqueta del bioma donde pelearíamos, se trataba de un pequeño bosque al que incluso se le agregaron algunos animales para hacerlo lo más natural posible.

—Cómo les decía, tengo algunas ideas.

La reunión de estrategia comenzó, teníamos sólo diez minutos para ponernos de acuerdo, era muy poco, pero se suponía que nos conocíamos lo suficiente para saber las habilidades de las demás.

Comencé a decir a todas mi plan, nos dividiríamos para rodearlas y atacaríamos a la bruja que tuviera la muñeca, luego regresaríamos en conjunto a la base. Dividí a cada una por el bioma según su elemento y habilidades, todo estaba cubierto.

—No sé, Avelin —de nuevo Lucerna se metió—. Tu plan contempla bien nuestras fortalezas, pero no las del enemigo —¡no lo entiende! ¡es mi momento! ¡mi oportunidad para que mi familia me note! ¡debían verme a mí!

—Lo hace —respondí rápido, no podía permitir dudas.

—¿En serio? ¿conoces las habilidades de las otras brujas?

Transferida a una Escuela de Brujas Tomo IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora