Tras aquel candente evento necesario para conseguir la pintura azul, apenas logramos vestirnos antes de que regresara el club de arte, nos dieron algunos materiales, nos ayudaron a llevar otros y regresamos con el resto de amantes de Lucifer, que habían terminado de limpiar la caverna principal donde sería la fiesta y se encontraban preparando las de alrededor.
Al parecer, usaríamos cuatro de las cavernas, una para la fiesta principal, otra para que las amantes de Lucifer puedan entrevistar a las chicas en privado, otra para el almacén y otra... para lo que llamaron una fiesta sorpresa.
No quise preguntar más.
Avelin y Mavis también hablaron sobre como planeaban poner una pista de baile, dónde iría el bar, mesas y demás.
Estábamos siendo ayudadas en eso, o más bien, se trataba de una cooperación mutua, nosotras tres nos encargaríamos de administrar y planear la fiesta y ellas pondrían algo de material y ayudarían con los arreglos, parecía poco beneficioso para ellas, pero las amantes de Lucifer querían una fiesta y un lugar para reclutar y nosotras algo de capital, así que, en teoría todo estaba bien.
Aunque obviamente el asunto de preparar pociones y pagar la mayor parte de las bebidas que se venderían, era nuestra responsabilidad.
Debo decir que dolió mucho hacer el gasto pese al precio especial que conseguimos en la tienda de la escuela gracias a Svetlana, pues nos acabamos casi todo lo que con tanto esfuerzo habíamos logrado juntar.
Al menos las chicas de segundo año que las amantes de Lucifer habían escogido como posibles candidatas el año pasado, nos ahorraban el costo en contratar camareras y cosas así.
Yo no las veía mucho porque solo había asistido los viernes y ese día era exclusivo para amantes verdaderas, pero me imaginaba que los demás días, el club del dragón rojo debía estar repleto de gente.
Es así que pasamos la semana preparándonos, enviando y trayendo pedidos de bebidas, tomando material para hacer pociones, y arreglando las catacumbas, siempre después de clases.
A las demás les gustó "mi idea" de dibujar nuestra historia en pisos y paredes, por lo que se me encargó seguir haciendo eso cada día hasta el comienzo de la fiesta, lo cual fue más sencillo gracias al dictado de Avelin, pero de verdad, trabajaba tan rápido que sentía que me saldría una hernia en la mano.
Aunque... fue raro descubrir a las amantes de Lucifer como brujas centradas y concentradas, no hubo perversiones ni distracciones, todas se enfocaron en hacer sus tareas. Tal vez no eran las brujas calientes adictas al sexo que creía.
Finalmente, el día viernes todo había quedado listo.
Todas veíamos el lugar desde la entrada y dábamos un último repaso a las instalaciones.
—Cierto, Erika, dijiste que tenías arreglado el tema de la música —Freila no dejaba pasar nada.
Asentí, mi reproductor ya estaba en el lugar desde antes, así que se los mostré y lo encendí.
—Creo que podemos hechizarlo para que se escuche muy fuerte y en todo el lugar.
—Musi, adelante —la líder no me respondió a mí, le dio la orden directa a la chica con el collar de perro, quien tomó el reproductor y pronto, Twisted Sisters se escuchó por todo el sitio.
—¡De eso estaba hablando! me gusta la energía de esas canciones —Freila estaba complacida.
—Una... una pregunta —también debía poner de mi parte—. Ya es... es viernes, ¿cómo invitaremos a todas para mañana?
—Ya nos encargamos de eso —la líder se encogió de hombros.
—¿Eh?
—No esperabas que fuéramos tan eficientes, ¿no? —un papel apareció en su mano—. Avelin nos dio la invitación en la que trabajaste, el club de arte le hizo algunos cambios, pero dejamos tu logo y luego hicimos al menos unos miles de estos y mandamos a algunos lacayos a repartirlos.
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Transferida a una Escuela de Brujas Tomo II
FantasyContinuamos con las desventuras de Erika y sus amigas tras la caída de la secta de Ginebra. Veremos a nuevos personajes, nuevas situaciones tan excéntricas como solo podrían ser al estar involucradas las brujas y aventuras que pondrán a Erika en sit...