𝙻𝚊 𝙷𝚎𝚛𝚖𝚊𝚗𝚊 𝙱𝚛𝚞𝚓𝚊 𝙳𝚎 𝙻𝚘𝚜 𝙿𝚎𝚟𝚎𝚗𝚜𝚒𝚎

❤︎𝙿𝚛𝚒𝚖𝚎𝚛 𝚋𝚎𝚜𝚘 𝚢 𝚏𝚒𝚗 𝚍𝚎𝚕 𝚜𝚎𝚐𝚞𝚗𝚍𝚘 𝚊𝚗̃𝚘

ℕ𝕒𝕣𝕣𝕒 𝕍𝕚𝕠𝕝𝕖𝕥𝕥.

Cuantas cosas no han sucedido en este año escolar, para empezar cada vez estoy más segura que Remus es un hombre lobo, lo que no comprendo es porque no, nos lo dice.

Dejando eso de lado los chicos y yo nos hemos convertido en la pesadilla de toda la escuela, somos reconocidos por nuestras fantasticas y únicas bromas; desde alumnos hasta maestros han sido víctimas de por lo menos una broma, por lo cual le hemos sacado más canas a la pobre Minnie.

Nos hicimos amigos del pottergeis de la escuela, llamado Pevees el déjenme decirles que gasta más bromas que los chicos y yo juntos, a veces nos echan la culpa a los chicos y a mi por bromas que el comete solo, es una falta de respeto a mi parecer.

Con mis clases particulares de magia me a ido de maravilla, he aprendido cosas simplemente sorprendente y Albus dice que tengo el potencial de toda una duelista, que si continuo como voy el no duda que pueda participar en la próxima competencia de duelista entre escuelas, por lo que me dijo desde hace 20 años que Hogwarts no logra ganar esta competencia y tiene esperanzas conmigo.

Ahora lo más complejo de todo Sirius, por mucho que lo he intentado olvidar simplemente no puedo, es como si todo el se hubiera metido en piel o mezclado con mi ADN. No puedo evitar los celos que me provoca cada vez que lo veo con su nueva novia que no dura más de dos semanas con ella, también e llorado mucho ya que siento impotencia a saber que me había enamorado del más mujeriego de la escuela y que para el colmo era de mis mejores amigos o aún peor, que se fijaba en todas las chicas de la escuela menos en mi.
No logro entender porque me ve solo como su amiga, Lily y Remus me han dicho que lo debo olvidar, y lo sé pero lamentablemente el primer amor nunca se olvida y Sirius a sido mi primer y creo que último amor; dudo encontrar a alguien que me trate como el lo hace o que me haga sentir lo que el me hace, que me abrace por las noches como si tuviera miedo de perderme, o que siempre que me salude me dé un beso en mi frente y se preocupe de mi estado de ánimo o si comí o no. Simplemente amo a Sirius Black.

ℕ𝕒𝕣𝕣𝕒 𝕊𝕚𝕣𝕚𝕦𝕤.

Los meses han pasado y por más que lo intento no logro olvidarla, he estado con una gran parte de la población femenina de Hogwarts, y por mas mujer que bese siempre viene a mi mente mi dulce Violett. Estuve a punto de tener mi primera vez con una chica de hufflepuff, pero apenas ambos estuvimos desnudos no pude sentir placer ni nada, ya que por mi mente solo pasaba que no era Violett, me disculpe con ella me vestí y fui directo a los baños donde me masturbe pensando en mi dulce Violett.

Ella huele a rosas, libros y pintura me encanta su olor, cada vez que ella duerme conmigo creo que yo no lo hago ya que me la paso acariciando y besando su cabeza, me encargo de velar por sus sueños y amarla en secreto y decirle cuando la amo en susurros. También he tenido algunos ataques de celos con mis propios amigos, ya que Violett es nuestra princesa pero es la chica de la que estoy enamorado, y no puedo evitar verlos horrible cuando la abrazan o duerme con ella

—¡SIRIUS!.—Fue el grito que recibí de James junto a tres almohadas.

—¿Que les pasa animales?.—les dije.

—Te estábamos hablando.—dijo Peter.

—Pero estaban ocupado pensando quién sabe que.—dijo James.

—Vamos James, ambos sabemos en quien estaba pensando.—dijo Remus.

—Claro en nuestra princesa Violett.

—Que les importa si estoy pensando en ella o no.

De repente la puerta fue abierta de golpe y entró una Violett muy ofuscada, tiro su maleta al lado de la puerta y se tiró en la cama de Remus que es la más cerca.