- David, ya te mandamos tres mails y ésta es la quinta llamada. Sería muy bueno que cuándo escuches éstos mensajes me llames.
- Hola... ¿David? Llevamos llamándote desde temprano en cada pausa que tenemos y necesitamos que respondas. Tenemos contratos que firmar y tendrías que estar con nosotros en la radio, según lo acordado. Por favor, devolvé el llamado o los mails.
- David, no llegaste a la presentación pero supongo que habrás escuchado el acústico en vivo, salió muy bien. Ya es tarde y tenemos que firmar los contratos para Samanta. Llamanos.
- David ¿tan ocupado podés estar? Estamos los cuatro llamándote desde la mañana, maldición ¿podés atender el teléfono? Hacé tu trabajo.
- David, ya nos vamos a dormir, son las 2 de la madrugada y no atendiste tu maldito celular. Esperamos tener una respuesta mañana, Samanta está esperando.
By Martín
La reunión con la banda no había sido más de lo que nos esperábamos, Chris y Joseph solo quieren reunir a la banda para juntar más dinero y los demás nos negamos, cada uno tenía sus propios proyectos lejos de gente tan poco productiva como ellos, aunque aceptamos juntarnos para un show a beneficio a principios de año. En parte creí que todo podría volver a funcionar pero la gente no cambia.
Volvimos al departamento de Jake y yo busqué mis maletas para irme a ver a mi hermana, que es lo que ahora más quería hacer. Éstos últimos dos días nos hablamos más que nunca por las ansias que tenemos de volver a vernos. Me despedí por unos meses de Seb y con Jake emprendimos camino a Los Angeles. Él no quiso que viajara en transporte público teniendo él un auto y tiempo libre, al fin y al cabo, eran unas dos horas de viaje, así que acepté viajar con él.
Jessy, mi hermana, vive en una zona llena de árboles y verde y todas esas cosas naturales y gimnasios y demás, no muy lejos del centro, al parecer es un lugar bastante poblado o a la gente le encanta estar en la calle. Llegamos a la dirección y con Jake sacamos mis maletas del auto y toqué el timbre. Hace ya dos años no la veo y estar acá me parece una locura. Al verla solo pude abrazarla y en todo el día no dejé de sonreir. Jake entró conmigo. Aaron, el nuevo integrante de la familia, duerme, así que tendré que esperar para conocerlo, mientras pudimos acomodar mis cosas en la que en las próximas semanas sería mi habitación y luego salimos al jardín, el sol brillaba, Los Ángeles tiene un clima hermoso
- ¿Quién vive acá al lado? Es una casa gigante... ¿está vacía? — pregunté mirando el terreno contiguo
- Unos chicos y su familia, son simpáticos aunque ahora no están, me dijeron que se iban a algún lugar de Europa por unos meses así que no se cuando volverán
- ¿Y no alquilan éste lugar en ése tiempo?
- No... bah, nunca vi a nadie... a veces viene gente y se queda, pero con ellos... suelen ser bastante ruidosos, tienen una banda y cuándo vuelvan voy a tener que hablar por el tema de Aaron y sus siestas... - solo asentí y seguimos charlando.
By Samanta
Al fin puedo volver a la oficina, los días sin ir a trabajar y sin tener a Martin en casa terminan siendo muy aburridos, aunque tuve suerte de tener tantos mails que repartir para todos lados. Me levanté temprano de lo ansiosa que estoy por anunciar los nuevos arreglos en Samanta & co. Music, esa empresa es mi vida entera y me encanta vernos crecer. Si bien mi idea de empresa era tener algo chico creo que ya no se puede mantener así y hay que aceptar que necesito más gente a mi disposición. Tomé un café mientras me preparaba para salir y terminaba de imprimir los nuevos contratos de cada uno de mis colegas, éste aparenta ser un buen día. Tomé las llaves del auto, miré mi correo una vez más, Bill todavía no había respondido ¿habrá algo que nos les parezca bien en los contratos? Hoy voy a llamarlos... Salí directo al garaje y me fui.
