AMELIA | THG

6.

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Hay tensión por mi parte y la de Katniss al ver como todo el Distrito 13 celebra con canticos de guerra aquella propo y el discurso de su presidenta.

—Con más gente de nuestro lado, hay más posibilidades de que Peeta y Annie puedan reunirse con nosotros—asiento ante las palabras de Finnick, Katniss busca consuelo en nosotros, eso desconcierta a la presidenta e incluso a su madre, pero es lo más lógico después de todo lo sucedido en este año.

Nadie mejor que nosotros la entendemos, no la presionamos, ella solo quiere un apoyo.

—Quiero irme de aquí, no quiero celebrar en un funeral—Boggs no se opone cuando caminamos lejos del balcón. Tampoco se opone cuando le pido permiso de acompañar a Katniss a su hora de caza en el bosque, siempre y cuando Gale nos acompañe.

—Coin debería dejar que todos sus habitantes salgan al menos una hora al día a tomar aire—tengo que cubrir brevemente mis ojos, no imagino el daño que puede hacerle a la gente que lleva toda su vida en esa colonia subterránea. —Lily solía decir que el cuerpo necesita de la luz solar.

—Tal vez tengas razón...— en poco tiempo, Katniss me explica como puedo quitar el dispositivo en mi tobillo que suele rastrearnos. También me explican sobre que frutos silvestres puedo recolectar y como ocultar una trampa.

Los pierdo de vista en poco tiempo, pero explican que a varios metros hay un río en el que podremos reunirnos y limpiar los alimentos recolectados, posiblemente ellos han encontrado un ciervo o algún jabalí para cazarlo.

En una bolsa puedo juntar suficientes hojas y frutos que podrán servir para que Sae prepare algo nuevo en el comedor, a paso decidido camino hacia el punto de reunión, atravieso algunas ruinas de lo que alguna vez fue una casa y me topo con Katniss y Gale. Muy cerca uno del otro.

—Debo de traer a Finnick uno de estos días...—se separan incómodamente y desvían la mirada. Me acerco rápido a ellos alzando mis manos— ¡No me malinterpreten! Hablo de que esto es un río y el sabe como pescar...¿sabían que el puede hacer redes o anzuelos con casi cualquier cosa?

Sin embargo no dicen nada, lo que hace que el silencio sea más incómodo.

El asunto con Katniss y Gale o Peeta es extraño. Siendo honesta no creo que tenga cabeza para pensar en sus intereses románticos, pero desde los juegos anteriores y antes de que el Capitolio me torturara, había un brillo diferente en la mirada de Katniss con Peeta. Recuerdo que él me dijo que aunque la amara por siempre, no se haría ilusiones porque ella no le correspondía, sin embargo Katniss se mostro muy unida a él en esos días. Incluso ahora ella evade a Peeta porque le afecta mucho no saber nada de él.

Y por otra parte esta Gale. Puede que no sea mi persona favorita del año, está muy metido en la causa de la rebelión y anteriormente había discutido con él por que me juzgaba muy rápido, pero ahora entiendo un poco su comportamiento, y las cosas que comparte con Katniss.

Paso el resto del camino en silencio, aunque escucho varias veces a los dos castaños felicitarme por mi buena elección de frutos, aunque me pierdo en la conversación para tratar de hacer una balanza sobre quien sería un mejor partido para Katniss.

Probablemente nadie. Ella no lo necesita. Aunque siendo sincera, Peeta sería la mejor opción. ¿Qué pasa si todo da vueltas y James se casa con ella? Ella sería mi cuñada.

El mejor giro de la historia de Panem.

—¿Amelia?—me pregunta Katniss mientras coloca aquel dispositivo en mi tobillo. Parpadeo rápidamente y observo a mi alrededor.

—¿Cuándo llegamos aquí? ¿Me he perdido otra vez no es así?—preguntó con decepción.—A este paso regresaré a la enfermería.

—No si no le decimos a nadie— le doy un beso en la frente mientras emprendemos nuestra caminata de regreso al 13.