AMELIA | THG

12.

Katniss y Peeta se dedican a entrenar en los siguientes días previos a los juegos. Ella me comenta, durante la cena que los tributos del Distrito 1 y 2 intimidan a casi todo el mundo, le recomiendo que se mantenga alerta y alejada de ellos y que se dedique a practicar otro tipo de actividades que les pueden ser muy útiles en la arena, Peeta cuenta durante la cena que el puesto de camuflaje se le da muy bien y que ha evitado las pesas, en la sala Katniss nos informa que se han entretenido mucho en los nudos y que ha aprendido unos nuevos, cuando ella se va a su habitación y solo se queda Peeta, lo invito a ir a la azotea, donde es poco probable que nos escuchen.

-¿Cómo has visto a los otros tributos?- le preguntó, luego de que permaneciéramos en silencio por varios minutos.

-Los profesionales tratan de intimidar a cualquiera de nosotros.- me contesta, observando la Ciudad.- creen que ninguno de nosotros tengamos oportunidad... y tal vez tengan razón.

Me duele escuchar esas palabras, por lo que tomo un gran suspiro y le hablo.

-Cuando yo llegué aquí, también creía lo mismo.- le dijo mientras él me observaba detenidamente.- ¿cómo unos pobres niños enfermos y desnutridos podrán ganar contra aquellos que se preparan toda su vida para esto? Pero hay oportunidades Peeta, y sé que puedes conseguir la victoria.

-¿Qué hay de Katniss?.-

-Yo sé lo que sientes por ella.- le mencione, logrando que se sonrojara al instante.- Pero dependerá de ti lo que quieras hacer en los juegos.

-Yo quiero que ella regrese.-

-Y yo quiero mantenerlos con vida.- le dije mientras lo tomaba de los hombros.- Pero necesito que me ayuden con todo esto, puedo inventar mil historias para el Capitolio para conseguir Patrocinadores, pero todo se destruirá si no lo demuestran. Recuerda que esta gente solo busca entretenimiento y harán cosas increíbles si les damos un poco de drama.

-Tal vez pueda hablar de eso...- me murmura Peeta y yo no lo entiendo, por lo que continua explicando.- Sí le confieso a Katniss mis sentimientos por ella en todo Panem, podrás conseguir más Patrocinadores...

-Lo hablaré con Haymitch.- le digo, convencida de su plan. – Hasta entonces, promete que lucharas en esa arena.

-Amelia, no quiero que los juegos me cambien.- me murmura cuando estoy a punto de ir a mi habitación.

-Eso es inevitable Peeta.- le respondo, tratando de que no se quiebre mi voz. – Siempre estará algo que te haga recordar todo, una y otra vez. Buena suerte mañana.

Todos los tributos tienen sus sesiones privadas con los Vigilantes el tercer día previo a los Juegos, lo que significa que es la oportunidad para Katniss y Peeta de demostrar sus habilidades. En el desayuno ambos se encuentran nerviosos y puedo apostar que en su mente repasan las cosas que pueden hacer en ese pequeño tiempo para conseguir una gran calificación.

-Amelia.- Katniss se atreve a preguntar. Me sorprendo, casi siempre se ha dirigido con Haymitch y nunca interactuamos mucho, tal vez mi Ex mentor la ha persuadido para hablar conmigo - ¿Qué hacemos en la demostración?

-No te detengan Katniss.- le digo mientras le paso unas galletas.- Demuéstrales lo valiosa que eres.

Las dos horas siguientes pasan en un abrir y cerrar de ojos, y mientras Peeta termina de contarnos su demostración una Katniss llega a paso acelerado y se encierra en su habitación.

Algo ha salido mal.

Tardé un momento en convencerla de que salga y nos explique lo sucedido, ella estaba muy alterada y debo de admitir que es impulsiva. Me gritó cuando trate de abrir la puerta, así que yo le devolví el gesto, dejándola sin palabras por un tiempo. Después me pidió disculpas y le asegure de que no debía de preocuparse por lo que había hecho, incluso nos hace reír cuando nos cuenta que cuando la flecha atravesó la manzana que había en la boca del cerdo del banquete, un Vigilante tropezó y cayó en la fuente de bebida.

-Me darán una baja calificación.- murmura ella sintiéndose triste por lo que acababa de hacer.

-Eso no lo sabes.- le dije yo cuando todos se reunían en la sala para ver la puntuación de los tributos. – con suerte, podré conseguir muchos patrocinadores. Recuerdo que yo obtuve un siete en mi participación, como siempre los Vigilantes ya no prestaban atención; yo también les hubiera lanzado la Espada.

Effie emitió un sonido de desaprobación mientras Haymitch decía ''tiene razón'', logrando que Katniss sonriera un poco más. Vemos la calificación de todos hasta llegar a nuestro Distrito, donde Peeta logra obtener un ocho. Todos lo felicitamos y cuando llega el turno de Katniss, puedo jurar que todo Panem exclama del impacto, su calificación es un once.

-¡Por Katniss Everdeen!.- Cinna alza su copa mientras observa a la castaña.-¡La chica en Llamas!

Esta noche fui invitada a una fiesta, donde habrá muchas personas influyentes en el Capitolio y los mentores tendremos oportunidad de conseguir patrocinadores. Haymitch y yo acordamos que el nuevo apodo de Cinna, causara mucho interés en Katniss por lo que será nuestro tema principal de conversación y por ello lo tendremos que difundir por todo Panem. Lily llega al Piso 12 con un vestido en una caja, es rojo con mucho encaje y es perfecto para el tema central, la chica en llamas.

Al llegar al lugar, varios mentores se encuentran reunidos en una sala en donde esperaremos a que la gente rica del capitolio se haga presente y comience a preguntarnos por nuestros tributos, muchos mentores conversan sobre futuras o posibles alianzas, casi siempre suelo hablar con Johanna Mason pero me sorprende al no verla por ahí, así que intercambio varias palabras con otros mentores de distritos profesionales, quienes intentan que les cuente un poco sobre Katniss. Justo cuando se empiezan a mostrar groseros e inconformes de que no les revelara información de ella, alguien más toma mi cintura y me abraza, Finnick Odair.

Sus ojos verde mar se muestran traviesos mientras besa mi frente, me aparto lentamente mientras le susurró al oído, ''hoy no me vas a distraer''.

''Pues tú lo estás consiguiendo''