【 XXIV: Operación Schadenfreude】

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Suspire con un quejido cuando vi a Arlen hablando con Carraway a la puerta de la base. No quería encontrarme con ninguno, y mucho menos los dos a la vez, así que dirigí mis pasos en otra dirección con la chaqueta colgando del brazo. Aún estaba revisando de nuevo las cinchas de mi sistema de ganchos. Sentía que las correas no estaban del todo firmes.

―¡Capitán Lee! ― Levanté la vista al llamado. Phillip movía una mano y se acercó corriendo con una gran sonrisa.

El pelirrojo se veía en excelente estado, y noté que su cabello estaba más largo, incluso con una pequeña trenza en la nuca. Sonreí de vuelta cuando llegó frente mio. La energía del escocés era contagiosa.

―Phillip, que bueno verte de nuevo― saludé alegre. Me abrazó de pronto y parpadeé algo extrañado, me había acostumbrado a los gestos de Patrick y Haytham, pero en ese momento no tenía la chaqueta puesta y el contacto se me hizo muy directo. Afortunadamente, me soltó pronto y me ahorré decirle algo.

—¡Estoy muy feliz de verlo! Supe que estos alemanes quisieron ponerme en otro grupo, pero el Gran Padre dio órdenes estrictas al vejestorio — Rió divertido.

—¿Vejestorio?— parpadee mirándolo confundido.

—¡Si! El líder de Alemania— Phillip asintió varias veces. Ian llegó detrás y saludó con una palmadita en mi hombro.

—Hey, capitán, ¿cómo está? ―El texano sonrió amplio ―He oído que ha sido una fiera estos días con los alemanes― levantó y bajó las cejas varias veces, causándome una risa.

―No es tan así. Han pasado varias cosas, pero les contare cuando termine la misión, ¿cómo fueron sus vacaciones? ― Me alegraba mucho de verlos, Phillip y su viva personalidad me mantenía fuera de pensar demasiado en todo, e Ian era alguien más en quien confiar para cuidar a Patrick.

―Oh, ¡muy bien!, Phillip conoció a toda mi familia finalmente. Fueron años de intentar convencerlo― Carcajeo con ganas y el pelirrojo rodó los ojos.

―No llevo tanto tiempo en la Corporación, pero si, me daba mucho nervios conocer a su familia, son muchísimos― abrió mucho los ojos al hablar de eso y parpadee.

―¿Si?... ―No sabía mucho de familias grandes precisamente.

Dyer asintió muchas veces.

―Si, entre sus padres, sus abuelos, sus... ocho hermanos, cinco tíos y sus parejas... y todos los primos y sobrinos... Había mucha gente, todos esperando a conocerme, fue aterrador, prefiero estar en una base insurgente― enumeró rápidamente y yo me encogí de horror. Esa si era una familia enorme.

―Ustedes dos tienen serios problemas con los vínculos familiares, ¡igual te divertiste mucho! ― Ian reclamó indignado.

―Después de dos días de adaptación y beber Lone Star y Ziegenbock Amber como si no hubiera un mañana, si―

Reí al oírlos hablar así, eran realmente divertidos. Viendo a Dyer, me pregunté porqué me había preocupado tanto al saber que no tenía información de antes de ser cazador. Era un buen compañero, y encontraba que era una buena persona igualmente. 

Tal como con Haytham, no importaba su pasado, sino lo que era ahora.

Sonreí de nuevo y Phillip me miró y parpadeó.

―Wow, ¿James? ¿Por qué me miras así? ― Su pregunta me sorprendió y levanté las cejas, pero antes de decir nada me abrazó ―¡No! ¡Espera, no dejes de sonreír!―

Me sentí terriblemente confundido y lo miré extrañado aceptando su abrazo.

―¿Qué estás diciendo? ― Levanté la vista y vi a los demás cazadores observándonos con extrañeza. Ya éramos un grupo lo suficientemente extraño, no quería más miradas así sobre nosotros.

Patrick Elgart, el Cazador.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora