【XXVII: El comienzo de la Cacería】

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Mi costado aun dolía de la última misión. Apenas habían pasado un par de días pero seguía en el área médica pasando por varias pruebas, y se estaba corriendo una exhaustiva investigación respecto a las filtraciones de información y como se había activado el sistema de alarmas de la ciudad durante la misión, arruinando toda la operación.

Agradecía estar en aislamiento porque esa situación me tenía tan nervioso que hacía que pasara horas en el baño por las náuseas, y el dolor de mi cuerpo se hacía insoportable. La filtración de información o todo sobre el sistema de alarmas... Mi consciencia se resistía a tal punto que parecía que médicamente mi estado era fatal. Campbell corría pruebas todos los días, espantada, incluso tuve que decirle que había inhalado mucho humo para disimular o darle alguna posible razón debido a su visible angustia. Era una espantosa situación en la que estar, pero por suerte, nada parecía haberlos llevado a mí o a Patrick.

Eso me aliviaba...Los alemanes podían estar histéricos, pero nosotros estábamos cubiertos.

A esa hora suspiraba tomando la medicina para las náuseas, masajeándome las sienes. La habitación estaba completamente cerrada, bajo tierra igual que las últimas ocasiones que había estado en el área médica. Hace poco me habían traído merienda pero la había vomitado igualmente, y me temblaban las manos cuando deje el vaso. Arlen no había aparecido, ni Carraway...pero tampoco había podido ver a mis amigos y los demás del equipo.

Me sentía solo allí, y no ayudaba a mis pensamientos.

No sabía cuánto tiempo había pasado cuando la puerta sonó y abrí los ojos. Para mi sorpresa, Haytham cojeaba dentro de la sala.

―¡Haytham!- me levanté rápidamente a ayudarlo y tomé su brazo, sonriendo ―¿como lograste pasar? Me tienen completamente aislado― estaba muy sorprendido y también muy contento de verlo.

Haytham sonrió y me abrazó primero, gesto que correspondí con gusto.

―Llegó el Gran Padre a la base― dijo entonces ―pensé que debías enterarte antes de que te agarrara desprevenido, me colé a avisarte con ayuda de Angus y de Uldrich― me soltó mirándome a los ojos y sentí la impresión como un golpe.

―¿Cómo que vino? ¿Llegó hoy?― no lo podía creer...

―Si, James. Llamó a la operación como uno de los fracasos más grandes de la década, y vino el mismo a revisar el asunto. Carraway, Arlen, todos ellos están bajo investigación― me miraba seriamente y trague duro bajando la vista.

―...Mierda, nuestro equipo― inhale profundo, podría ser que estuviéramos en problemas... O en aparentes problemas.

―No demasiado, parece que alguien además hackeo el sistema de comunicaciones, tu collar falló y tu rastreador en algún momento, resulta que ese problema lo tuvieron muchos más, entonces se está poniendo en duda la seguridad general de todo el sistema informático de la base― me contó además ―se destapó estos dos días así que imagine que no te has enterado―

Abrí mucho los ojos.

Ese solo podría haber sido Patrick. Se había adelantado y aumentado las posibilidades de que el problema fuera de mayor escala y evitar ser visto...El no sabia que...

En todo caso, había sido un movimiento acertado, Carraway debía estar completamente alerta.

―¿James? ¿Estás sonriendo?― La voz de Hache me sacó de mis pensamientos y volteé a mirarlo.

―Oh, lo siento― me sorprendí de mi mismo, tapándome la boca ―Espero que el Gran Padre le de un alto a Carraway, ha abusado mucho de su rango― bajé las manos apretando los puños. Iba a aprovechar de contarle todo a mi padrino, nadie me había interrogado después de todo, debía estar esperando a hacerlo él mismo.

Patrick Elgart, el Cazador.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora