【XXVII: El comienzo de la Cacería 2】

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Mi padrino estaba en peligro.

Ese pensamiento me causó un escalofrío en la espalda. Henry debía haber sabido que el Gran Padre había llegado a Alemania, y sin duda querría ir por él.

Apreté los puños.

—Y te tomaste la molestia de pasar por...— me lleve las manos a la cabeza. ¿Cómo podía ser que ese ridículo hubiera incluso pasado por mi habitación? Era un imbécil, más aún después de lo que había hecho.

—maldito— eché a correr rápidamente. Todos buscaban al insurgente, yo fui directamente donde debería estar el Gran Padre, aunque era difícil aún para mí moverme en la base.

La molestia de antes se había desvanecido, lo más importante era ahora asegurarme de estar allí para mí padrino en caso de que Henry lo alcanzara, aunque una cosa me confundía. Horvart había sido capaz de alcanzar mi habitación sin ser detectado, ¿Cómo es que ahora sí lo había sido? O quizás habían más insurgentes...

—¡Capitán!— la voz de Phillip me tomó por sorpresa y frene de golpe, girando. El pelirrojo se asomaba desde una habitación.

—¡Phillip! ¿Estás con Ian?— me apresure hacia él.

—Si, y Uldrich, estamos viendo que duerma y tome la medicina que le dieron, es una especie de gas que― comenzó a describir y lo detuve.

—No hay tiempo, ármate y quédate con ellos, hubo una infiltración insurgente, no sé si es uno o muchos, pero Uldrich no puede pelear e Ian sigue herido así que protégelos. Yo iré con el Gran Padre— hablé rápidamente y el pelirrojo abrió mucho los ojos.

—entendido, Capitán— se vio muy serio y se fue rápidamente a buscar sus armas.

No perdí más el tiempo y seguí mi camino a toda velocidad. Mi corazón latía con fuerza ante la expectativa de todo lo que podría pasar.

―¡James! ― Haytham apareció de pronto seguido por Patrick y frené de golpe.

―¡Haytham! ¡Tú no puedes correr! ― le dije de inmediato y lo detuve ―¡Ve con Phillip de inmediato y quédate fuera de problemas! ―

―¡Es ese insurgente de nuevo! ¡No permitiré que corras peligro!- Hache me gritó de vuelta agarrando mi brazo. Vi su pierna flaquear y me apresure en afirmarlo antes de que cayera al suelo.

―Cuidado... ― Lo miré preocupado y se hizo un silencio incómodo en el que Haytham apretó los labios con frustración.

―Rayos... ― Se incorporó de nuevo lentamente y tomé el brazo de Patrick tirando de él.

―Cuida de Haytham, vayan con Phillip y protejan también a Ulrich. Es una orden― Los deje y me fui corriendo, ambos llamándome a la par que la base tembló como si hubiera sido golpeada por una explosión.

No parecía ser ya una simple infiltración en mi opinión.

Corriendo gire por un pasillo y me detuve sorprendido, encontrándolo lleno de cadáveres de cazadores que parecían haber sido pillados de imprevisto, muchos sin su equipamiento ni armas... La sangre cubría el suelo de baldosas y también manchaba las paredes. Apreté los puños y me moví por el lugar tomando una de las pistolas. Estúpidamente había salido de mi habitación sin las mías y mucho menos mi traje de combate, tendría que tener cuidado.

Un cazador pasó por el pasillo siguiente y me apure hacia él.

―¡Hey! ¿Dónde está el Gran Padre? ― pregunte rápidamente.

―¡En el sector C! ¡Me dirijo hacia allá! ― dijo rápido de vuelta y asentí corriendo con él. En la carrera, pronto éramos un grupo más grande el que se dirigía al sector dónde debía estar mi padrino, cada uno más o menos armado.

Patrick Elgart, el Cazador.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora