Capítulo 6

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-Entonces, ¿cuál es el gran plan?- preguntó Dean.

-¿Van a unirse a nosotros?- preguntó Ginny.

Dean se encogió de hombros. -No sé cuánto, pero desde luego no me importa estar cerca para planear y esas cosas-.

-Sí, es genial estar en la onda por una vez-, se rió Seamus.

Neville asintió. -Sí, a veces me preguntaba qué estaban haciendo cuando se iban a su rincón y cuchicheaban-.

Harry tragó saliva con culpabilidad. -Lo siento, no pretendía que te sintieras excluido, aunque probablemente era mejor que no participaras en esos planes, ya que casi siempre eran peligrosos-.

-Sí, casi morir una vez fue suficiente para mí, gracias-, murmuró Ginny.

-¿Cuándo ocurrió eso?- preguntó Neville.

-En segundo año. Había conseguido el diario del Señor Tenebroso y me iba a utilizar para resucitarse a sí mismo-, se estremeció Ginny.

-¿Vas a estar bien con todo esto?- preguntó Harry. -Sabes que no tienes que involucrarte, ¿verdad?-.

-Estaré bien, creo-, Ginny sonrió débilmente. -Quiero decir que en el diario era un niño desesperado por no morir, así que puedo entenderlo. Además, papá tenía razón, no debería haber seguido escribiendo en él después de que empezara a responderme, y definitivamente debería haberle dicho algo a alguien. Creo que mientras no tenga que verlo, estaré bien-.

-De acuerdo-, Harry sonrió, -pero avísame si algo es demasiado para ti...-

-Lo mismo digo por los demás. Sé que somos Gryffindors, pero no es valentía arriesgar nuestras vidas sin razón. Es diferente si la gente está realmente en peligro, pero estoy empezando a darme cuenta de que a veces lo valiente es pedir ayuda-.

-A veces pedir ayuda es difícil-, Neville estuvo de acuerdo.

-Pues ahora les pido ayuda a ustedes-, sonrió Harry. -Necesito idear algo que sea suficiente para que el Señor Tenebroso acepte que añada a Snape a mi lista-.

-Tal vez Harry pueda ofrecerle al Señor Tenebroso su culo en bandeja-, se rió Seamus.

-Bueno, hemos firmado un tratado de paz, así que no veo cómo va a funcionar eso-, frunció el ceño Harry.

-No me refería a eso-, sonrió Seamus, -sino más bien a que hiciera sus maldades contigo, ya que me imaginaba que desflorar vírgenes era el tipo de cosas que les gustaba hacer a los Señores Oscuros-.

-¿Qué te hace pensar que soy virgen?- resopló Harry, haciendo que los demás soltaran una carcajada.

-Para ser justos, creo que todos lo somos-, lo tranquilizó Neville.

-Habla por ti-, se rió Seamus.

-Bueno, Harry tiene una cita con Cho de todos modos, así que dudo que eso sea realmente una opción-, afirmó Ginny.

Harry se retorció. -Sí, casi me olvido de eso-.

-¿Cómo? Fue hace sólo, ¿qué, dos días?- exclamó Dean. -Además es Cho Chang, probablemente la chica más guapa del colegio-. Ginny miró mal a Dean.

-Bueno han pasado muchas cosas- argumentó Harry.

-Aun así estoy con Dean en esto- dijo Ron. -Quiero decir que estuviste enamoradísimo de ella todo el año pasado y te alegraste mucho cuando por fin conseguiste una cita con ella-.

-¡Y fue un desastre!- se quejó Harry. -Ella estuvo pensando en Cedric todo el tiempo y cuando nos besamos estaba mojado de donde estaba llorando-.

-Mojado pero aún así bueno, ¿verdad?- inquirió Seamus y Harry sólo pudo hacer una mueca pensando en ello.

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