Fisio | Enzo Fernández

55 - No estoy celoso

Las semanas pasaban y todo estaba yendo bien. Hasta que hace unos días cuando Valen contó que había conocido a un chico en una cafetería, que estaba hablando y que le gustaba. Desde ese día Enzo estaba raro, estaba más distante conmigo y un poco más seco y más frío.

Yo pienso que está celoso, y eso me duele. Se supone que ya no sentía nada por ella no? Mentira, estaba celoso de que Valen haya encontrado a alguien con quién hablar.

Esa noche Valen quería presentarnos a Erick, el chico que había conocido, así que nos reunimos los 5 en casa, Valen, Erick, Enzo, Oli y yo. La cara de culo de Enzo era evidente, no tenía ni una sola intención de disimular, de mostrarse feliz por Valen que empezaba a rehacer su vida. Yo estaba harta de su cara de culo, de su frialdad hacia mi, incluso hacia Oli.

Valen se había dado cuenta de eso y me dijo que no me preocupara, que hablara con el y aclarara las cosas. Pero yo ni ánimos de hablar con él tenía, tenía ganas de irme, realmente tenía ganas de irme.

La noche paso re tensa, Valen trataba de sacar algún tema y charlar amenamente pero Enzo siempre  respondía seco y no dejaba de mirar al acompañante de Valen. Cuando ellos se fueron Enzo llevó a Oli a dormir.

Yo me agarre una burra, una frazada para envolverme y me fui afuera, al balcón. No tenía ganas de hablar con Enzo, estaba enojada, decepcionada, triste. Todo junto.

— Acá estabas -apareció Enzo por la puerta-

Yo no dije nada, solo seguí tomando mi cerveza, mirando hacia el horizonte.

— Che... -se sentó alado mío-. Te estoy hablando -me miró confundido-

— Ahora si? -dije en tono seco sin mirarlo-

— Ahora que te pasa? -inclino todo su cuerpo hacia mi para verme-

— A mi? -lo mire seria-. A vos que carajo te pasa? Pasaste toda la noche con cara de culo. Toda la noche sin darme ni cinco de articulo -volvi a mirar al horizonte-. Y ahora no tengo ganas de hablar con vos, mejor andate y aclarate las ideas, porque estoy podrida de tus celos hacia Valen y su relación.

— Celos? -preguntó-. No estoy celoso -dijo serio-. Por qué estaría celoso de Valentina?

— Si no estás celoso avísale a tu cara la próxima o aprende a disimular -me levanté envuelta en mi frazada y me fuí más cerca de la baranda-

— Pará morocha que te pasa? -preguntó, se acercó y me abrazó por las espalda-. De dónde sacaste que estoy celoso?

— Déjame -me aleje de él-. No lo saqué de ningún lado, vos me lo mostraste -lo mire, el parecía confundido-. Desde que Valen nos contó de Erick te pusiste re pelotudo Enzo, estás re seco, estás frío, no me das ni cinco de bolilla, ni una puta sonrisa tuviste hoy incluso cuando Oli se acercó a vos. -lo mire a los ojos y tome otro trago de mi cerveza aguantando las ganas de llorar por la bronca-. No me importa si no me das bola a mi, pero Oli es tu hija, ella si se merece, ella necesita de tu atención -se quedó en silencio unos segundos-. Sé honesto con vos mismo y conmigo Enzo. Si todavía sentís algo por Valen decimelo y ya, yo lo voy a entender, es la mamá de tu hija y ustedes tuvieron una historia -yo lo mire casi suplicando-. Pero no me boludees más, solo eso te pido -me volví a sentar en el sofá de exterior que teníamos mirando hacia otro lado, aguantando las ganas de llorar-

Estaba cansada, estaba enamorada de Enzo, pero, de qué servía estar enamorada si él todavía seguía sintiendo cosas con Valen?. Y lo entiendo, es la mamá de su hija, modelo, influencer, es hermosa, es elegante, yo solo soy una fisioterapeuta común y corriente.

No podría competir con ella jamás, tampoco quiero, porque sé que voy a perder.

— Confias en mi? -preguntó parado desde donde estaba-