Los días habían pasado desde ese primer entrenamiento en Argentina, era miércoles a la mañana, mañana jugábamos contra Panamá. Yo estaba en la cama viendo unas cosas en el celu, Enzo estaba cambiándose y mirándose al espejo, al parecer iba a salir
- ¿No te vas a cambiar? -se sentó en la cama mirándome, dándome unas palmaditas en las piernas-
- ¿Para? -me reí-. Yo no voy a salir, vos al parecer si
Yo seguía con mi pijama sentada como indiecita en la cama. Hoy era miércoles, día previo al partido con Panamá Así que era día de concentración y relajación.
- Porque quiero que vayas conmigo -sonrio y se acercó para darme un besito-. Los chicos de river están entrenando ahora y quiero ir a verlos -puso sus manos en mis rodillas-. Y quiero que vayas conmigo, para conocer el monumental -tenia sonrisa como de feliz cumpleaños-. Dale amor, vamos
- ¿Y yo que voy a hacer? -me reí-.
- Acompáñame gorda dale -recosto su cabeza en mis piernas-. Vení conmigo -me miro haciendo ojitos-
- Bueno -me reí y le di un besito en la nariz-. Te acompaño cielo
- Gracias hermosa -me beso incorporándose y abrazándome-. Cambiate, te espero -beso mi mejilla levantándose de la cama-
Suspiré y me levanté de la cama, agarre un jean, una remera blanca de Gucci que Enzo me había comprado una vez y una zapa blanca. Me saqué el short y el top del pijama dejándolo doblado sobre la cama, me puse un sostén.
- Bebé ¿me ayudas? -me acerque a él dándole la espalda para que me ayude a cerrar el corpiño-
-sonrio-. ¿Querés que lo cierre? -sentí sus manos agarrar el sostén, me dió un besito en la espalda-
- Si amor, porfi -me reí y me mordí el labio al sentir su besó-
-sonrio y abrochó el corpiño-. Listo beba -me dió una palmadita en la cola y riéndose-
- Gracias cielo -me di vuelta y le di un besito-
Me puse la remera y le até un nudito para que no quedará tan larga y después el jean, haciendo un pequeño dobles en la parte de abajo para que se vea un poco el talón y me puse mis Adidas blancas de siempre. Me peine, me puse desodorante y perfume.
- ¿Lista? -sonrio levantándose de la cama-
- Si, creo que sí -me reí-
- Vamos entonces -agarro mi mano y me pegó a él-. Hermosa -me dió un besito-.
Me reí y salimos los dos tomados de las manos, él ya había preparado el mate así que ya estábamos listos. Salimos y nos subimos al auto, no quedaba muy lejos así que unos 20 minutos después llegamos. Bajamos, me volvió a tomar de la mano y entramos. Me mostraba todo lo que veía, él conocía de memoria el lugar, y se veía súper emocionado. Algunos chicos se acercaron a saludarlo y pedirle fotos, me parecía súper lindo, la forma en la que él los trataba y lo emocionado que se veían los niños.
- Te ves muy feliz -me reí mirándolo mientras él veía como los niños se iban-
- Si, es raro todo eso para mí, pero es lindo -sonrio y se acercó para darme un beso-. Vení, vamos a saludar a los pibes
- Dale -entramos a dónde estaban los chicos entrenando, en el gym-
- Eh! ¿Qué hacés campeón? -se acercó uno de los chicos para saludar y abrazar a Enzo-
- ¿Qué hace wacho? ¿Todo bien? -se saludaron con un abrazo-
Todos empezaron a saludarlo y abrazarlo, el estaba feliz, se veía feliz, eran sus compañeros con quiénes jugaba hace poco más de seis meses. Después de saludar a todos, Enzo me presentó a los chicos, me presento como "mi mujer", fue muy raro, siempre decía que era su novia, que ya se sentía lindo, pero cuando dijo mi mujer mi corazón se agrandó de la emoción, se escuchaba muy lindo.
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Fisio | Enzo Fernández
Fanfiction- Pensé que solo querías coger conmigo - Obvio que quiero eso, estás tremenda y me volvés loquito. Pero no quiero solo eso con vos...