Rubia Sol Morena Luna (JENLISA) (CHAELISA) G!P

Capítulo 22

Cherry - Lana Del Rey

A touch
From your real love
It's like heaven taking the place of something evil
And lettin' it burn off from the rush
Yeah, yeah
(Fuck)

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Las palmas de los pies hicieron un ruido sordo al caer en la grava y Lisa agradeció al cielo no haberse doblado un tobillo cuando cayó desde esa altura, no se lo permitiría nunca. Dio una vista ambiental, la misma piscina del inicio seguía intacta, las reposeras continuaban posadas a los costados, y las lamparas amarillas alumbraban el camino de piedra hasta la enorme casa blanca.

Caminó decidida, estaba casi segura que se había demorado más de 10 minutos y no quería alterar a la morena. Entró por la puerta del comedor, recordaba haber entrado en esa misma casa hace al menos un año atrás, cuando los Hutcherson realizaban barbacoas y la invitaban a ella y a su familia a pasar el rato, así que tenía una idea de la estructura interna.

Pero ciertamente, habían cosas diferentes.

No pudo evitar que sus dedos rozaran la mesa de madera que sostenía portarretratos de la familia Kim. Los 4 juntos, las hermanas solas, Jennie de niña embarrada en helado de chocolate. Sus comisuras se alzaron inconscientemente. Continuó su pequeño recorrido, cayendo en los diferentes certificados y premios de la familia. Varios de Orquesta y Coro por Jisoo, un diploma de leyes, un certificado de campeón de golf para Jiyong Kim.

—Probablemente le patearías el trasero a mi papá en el golf, ese diploma es solo para aparentar. —Murmuró una voz conocida a sus espaldas. Lisa dio un respingo, volteando para encararla.

—Jesús, un día de estos en serio voy a morir de la impresión.

Jennie rió con suavidad.

—Vaya, solo me he puesto una pijama, Lisa. No seas exagerada. —Canturreó con humor.

Lisa bajó su mirada desde los ojos gatunos hasta el conjunto de seda rosada a lo que Jennie parecía llamarle pijama. Una blusa sin mangas que dejaba parte de su abdomen descubierto y un short a juego que parecía más una braga que cualquier cosa. Lisa se relamió los labios, desviando la mirada cuando una parte conocida de ella comenzó a palpitar.

Vamos, no seas una puberta. Es solo una pijama.

—Creí haberte dado 10 minutos, y ya van casi 20. Y no estás en mi habitación como lo he indicado, ¿vas a seguir desobedeciendome?

La pelinegra inspiró hondo. Amaba cuando Jennie se ponía demandante.

—Tenía que esquivar a mi Nana, estaba en el patio cuando iba a pasar. —Se excusó con suavidad.

—Bla, bla, bla. ¿Cuando tiempo ha pasado desde que he dicho lo último?

—¿U-un par de segundos?

—Segundos desperdiciados. —Tomó la mano de la pelinegra, y la jaló escaleras arribas. Lisa volteó a ver la enorme pantalla que reposaba en la pared de la sala.

—¿No deberiamos estar abajo? Si tus papás llegan, no creo que les parezca bien que...

La morena se detuvo de improvisto, haciendo que el pecho de Lisa se golpeara con su espalda de golpe.

—Lisa, estoy segura que puedes darle un mejor uso a esa boca. Te aconsejo que guardes silencio.

La miró por el hombro, los ónice de Lisa cayeron en esos ojos chocolate y se derritió por completo mientras asentía.