Nueve

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Llegaron las vacaciones de verano, al fin Pete tendría un descanso del trabajo y podría quedarse con su pequeño a dormir en casa.

El citatorio en el juzgado era esa misma semana, intentaba mantener la calma pero algo en su interior lo hacia sentir inquieto, sin estar muy seguro de que era esa sensación.

-Hoy vamos a pasear- arreglo al pequeño y le dio su biberón de leche justo antes de salir de casa, lo llevaba en su pequeño canguro pegado al pecho.

Fue a una cafetería, no era tan caro, aun con sus gastos a veces intentaba consentirse un poco como en esta ocasión, lo valía, se esforzaba y trabajaba duro. Termino su comida y volvió a darle otro biberón listo al pequeño, dejándolo dormido antes de pagar la cuenta e irse del lugar.

Caminó un poco por el centro disfrutando del inicio de sus vacaciones.

-Tan bonito- acaricio la espalda del pequeño mientras su otra mano lo sostenía de donde iba sentado pegado a su pecho- Eres el bebé más hermoso.. no importa todo lo que pasemos.. yo te amo justo como el día en que me entere que venías- beso su cabeza suspirando.

De un momento a otro apretó fuerte el agarre abrazando al pequeño para protegerlo, sentía algo presionando su espalda.

-Camina- le dieron un pequeño empujón hasta llevarlo a una calle más solitaria.

-¿Qué quieren?- miro alrededor, eran al menos tres hombres grandes, podía notar que llevaban armas- Llévense mi cartera.. pero no lo lastimes-

-No somos asaltantes- le respondió uno de ellos- Traemos un mensaje-

-Se.. equivocaron.. yo no hice nada malo..- no sabia de que trataba esto pero le daba mala espina.

-Lo tenemos- otro de ellos acerco un teléfono con una llamada en altavoz.

-Hola cariño- apretó con más fuerza el agarre en su pequeño al escuchar la voz- Te dije que.. no quería llegar a los extremos-

-¿De qué se trata esto? Estoy asustado..- respondió viendo como los otros dos apuntaban sus armas en su dirección, uno hacia él y otro a su pequeño aun dormido.

-Vas a retirar esa demanda, inmediatamente-

-Pero.. no te hace daño eso Kim, solo es para.. solo.. podemos llegar a un acuerdo- intento convencerlo.

-¡No! Yo te advertí desde un principio.. qué me dejaras en paz-

-Nos están apuntando... - comento sintiendo su voz quebrarse.

-Si, a eso se dedican.. y tienen instrucciones

-No- se movió cuando sintió que trataban de jalar al pequeño haciéndolo despertar asustado y empezar a llorar.

-Incluso al teléfono son irritantes..- hablo de nuevo- déjenlo..-

-Kim.. ¿Por que..?- intentaba tranquilizar al pequeño que lloraba con fuerza contra su pecho.

-Te lo advertí Pete, que no te volvieras a cruzar conmigo, no te iba a gustar y me vienes con una maldita reunión con abogados, no te daré ni un solo centavo de mi dinero

-¿Solo tengo que retirarla?- pregunto en voz baja.

-Exacto, se donde vives, perfectamente donde trabajas y a donde llevas a ese mocoso cuando no esta contigo, cada paso que das es vigilado por mi. Así que vas a quitar esa estúpida demanda o...- dejo la frase en el aire mientras uno de los hombres cargaba su arma y la acercaba al bebé- Me desharé yo mismo del problema en cuestión

Second ChancesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora