Veinticuatro

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-Papi- lo llamo Saint mientras corría a donde lo esperaba, saliendo de la guardería.

-Listo mi amor- lo cargo con cuidado- vamonos-

-A casa..- dijo el menor mientras tocaba curioso el arete colgando en el oído de Pete.

-¿Te gusta?- pregunto sintiendo el toque suave.

-Si.. brilla bonito- asintió.

-¿Sabes que día es hoy?- pregunto mientras lo sentaba en el parador del autobús.

-¿Amigo Vegas?- lo miro confundido.

-Así es, hoy vamos a salir con tu amigo- acaricio su mejilla- ¿Te sientes bien con él?-

-Si- asintió varias veces- ¿Donde?-

-No lo se cariño, siempre nos da sorpresas pero nos pondremos muy guapos- el autobús llego y fueron a casa.

-Ese no- negó con la cabeza cuando Pete le acerco una overol de mezclilla.

-¿Entonces cual quieres?- pregunto sacando otros dos.

-Mhh..- el pequeño veía las prendas- ese- señaló uno color rojo.

-Bien.. te gusta lo llamativo- dijo divertido terminando de vestirlo.

Después se cambio el mismo y se arreglo un poco, había conseguido el coraje de intentar peinar su cabello diferente y cuidar más su piel últimamente.

A estas alturas, ya llevaban algunos meses de relación, Macau se había graduado y estaban recien saliendo de vacaciones de verano precisamente. 

-Listo, vamos a esperar a que nos llame- sentó al pequeño en la sala mientras revisaba la mochila con lo necesario.

El timbre del departamento sonó, haciendo qué un extrañado Pete fuera a abrir con precaución. Encontrando a Vegas con una gran sonrisa y un pequeño león de peluche en las manos.

-¿Por que no me llamaste?- pregunto abriendo por completo la puerta.

-No quería presionar.. vine un poco antes de lo acordado, creí que aun no estarían listos pero mira..- entro al lugar- que guapo esta Saint- jugó un poco con sus zapatos- Y que lindo esta mi novio- se acerco a Pete para besarlo en la mejilla.

-Vegas.. enfrente de él no- le dijo en voz baja.

-No seas tímido, él se ve muy tranquilo con esto- respondió sonriendo.

-¿Uno neón?- pregunto señalando la mano de Vegas.

-Ah si.. es para ti, es una pista.. ¿A donde crees que vamos?- pregunto quedando a la altura del menor.

-No se..- negó con la cabeza.

-Recuerda que hablamos la semana pasada pequeño.. ¿Donde hay muchos animales?- pregunto haciéndole cosquillas con el pelaje del animal.

-Zo..zomono..nogico- dijo confundido.

-Zoológico- corrigió en forma lenta- ya lo aprenderás después, pero si lo recuerdas.. ahí iremos hoy, veremos un león como este ¿Quieres ir?-

-Si, pero.. este bebé..- tomó el pequeño peluche.

-Si, este es muy bebé, el qué veremos es más grande- lo tomó en sus brazos para cargarlo.

-¿No muerde?- pregunto asustado.

-No, por eso vas conmigo, yo no dejare que te muerda ¿Bien?- beso su mejilla rápidamente.

-¡Si!- asintió sonriendo y abrazandose con fuerza a su cuello.

El ultimo par de semanas, con autorización de Pete, Vegas había comenzado a ser más demostrativo de cariños con el menor, intentaba ir lento pero ese niño era muy efusivo. Rápidamente se acostumbro a los abrazos, besos en su frente, las cosquillas y ahora estaba trabajando en los besos en la mejilla. Todo siempre frente a Pete, sabia que no tenia ninguna intención turbia ni enferma, pero por confianza y seguridad, Vegas sabia que debía mantener una línea mientras el propio niño desarrollaba más apego y confianza hacia él.

Second ChancesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora