Sesenta y ocho

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-Quiero que le de un poco de sol..- dijo Chay con el pequeño en sus brazos.

-No podemos salir del cristal y lo sabes- respondió Pete viendo a Saint jugando con su pelota.

-Pero mi niño necesita algo de sol.. solo serán unos minutos- se puso de pie- ¿Ninguno esta en casa?-

-Si pero se fueron a reunir a la oficina- lo miro con cuidado.

-Solo será un momento.. ven cariño, necesitas algo de color- camino hasta la puerta abriendola con cuidado para salir- Si.. necesitaba sentirlo directo- se quedo ahí de pie respirando el aire fresco y sintiendo el calor en su piel.

-Chay.. regresa- lo llamo Pete del otro lado del cristal.

-Solo unos minutos.. ¿Verdad? Si, te gusta el sol- dio un par de pasos mientras su bebé hacia pequeños sonidos de gorgoreos, como risa.

Paseo un poco mirando alrededor, solo había pasto y flores, nada extraño, incluso en el cielo, azul y despejado, con algunas nubes pasando. Se sentía tanta paz. Cuando creyó qué fue suficiente regreso a su lugar dentro de los muros de cristal.

-Es peligroso que hagas eso- le dijo Pete.

-Si pero lo necesitábamos.. Mira que bonito color en sus mejillas.. mi niño es precioso- beso su cabeza muchas veces.

-Lo se.. a veces siento que Venice esta muy pálido también pero no puedo sacarlo al sol directo- tomó el biberón para darle de comer.

-Podrías intentarlo como yo.. solo son unos minutos.. no es bueno que se la pasen encerrados asi- comentó tranquilo.

-Lo pensaré..- respondió sonriendo.

-¿Hiciste qué?- pregunto alterado el mayor de los tres en la oficina.

-Fue un error, me distraje pero ya lo corregí- respondió Macau.

-¿Te distrajiste? ¿Como? ¿Que más haces mientras cuentas la ganancia del día?- pregunto molesto su hermano.

-Solo me confundí..- dijo como excusa- pero ya lo arregle-

-Si, después de acusar al cajero de que faltaba dinero y lo golpearan- reclamo su padre.

-Pero esta bien.. no lo habían golpeado tanto cuando aclare la situación- volvió a excusarse.

-Pero ya lo habían asustado lo suficiente..- se quejó de nuevo Vegas- ¿Qué hacías? ¿En que pensabas como para no contar bien el dinero?-

-¡Nada! ¿Acaso no me puedo confundir nunca?- levanto la voz.

-No cuando estas arriesgando la vida de alguien y pones en juego su credibilidad- le dijo su padre.

-¿Bebias con él otra vez? ¿O te daba algún servicio privado?- pregunto Vegas entrecerrando los ojos.

-No insinues cosas- dio un paso adelante defendiendose- Nunca haría algo asi-

-Pues explicame.. de tu conteo sale el salario diario de muchos empleados.. no debo recordarte la importancia de eso y mucho más.. acusaste al cajero de que faltaba dinero.. es robo..- suspiro- ¿Sabes que se hace a los ladrones? No creo que hayas sido consciente de eso.. si no te dabas cuenta a tiempo.. le iban a cortar las manos.. esa es la ley de nosotros-

-¿Por que? Solo iba a despedirlo y ya- respondió pasando saliva.

-No, así no funciona ese mundo Macau. Entiende.. nuestra familia no se anda con juegos.. se paga con intereses todo lo que nos hagan- le dijo ahora su padre.

-Estuviste a punto de arruinar la vida de alguien que no hizo nada.. solo porque tu.. estabas más ocupado en otra cosa sin concentrarte en los numeros- Vegas le dio un empujón en el hombro- representas el liderazgo de esta familia.. no puedes hacer eso, dejaran de confiar en ti y cuando dejan de hacer eso.. entonces vienen los problemas de rebelión internos-

Second ChancesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora