21 JUNIO 2023

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Quiero romper contigo justo ahora, no hasta mañana que te dignes a contestarme algo medianamente decente.

Y sé con certeza que me detengo porque es un reflejo, que esta ansiedad viene con mi enfermedad.

No me das espacio ni para quererte ni para apreciarte, y aunque no me duele haberte regalado otra oportunidad, odio saber lo que hiciste con ella. Pero esa ya no es mi responsabilidad.

Sé que la desconfianza es un síntoma, pero no haces nada más que agravar el peso de dejarte entrar otra vez.

Quiero amores de esos que duran horas de llamadas, flores y saludos. Besos cada vez que se nos atraviese el cuerpo del otro en el corredor, que no me queden dudas de dónde puedo doler con intensidad. Palabras dulces, públicamente, regalos sorpresa y un montón de interés.

Quería que fueras tú.

Aunque solo prometes y nunca me cumples.

Te has cerrado a mí y no hay manera de amar a alguien de ese carácter con mi condición.

Con todo el duelo en mi pecho y sabiendo que se agotaron las posibilidades, pienso mis palabras y las dejo reposar hasta mañana. No quiero hacer esto por mensaje, pero ya es demasiado.

No termino de sentirme cómoda, no vemos las cosas igual, nunca va a funcionar.

Aunque sea mala con las despedidas, voy a llorar, tendré que evitarte, empezar el contacto cero,  pero el dolor va a pasar. En cambio, que tú me quieras como lo requiero, me demostraste una vez más que no va a suceder.

Los síntomas de la existencia: Diario.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora