Los síntomas de la existencia: Diario.

Hamlet's dilemma

Mi mente esta un poco desinteresada en los movimientos, es curioso en lo que se convierte una vez que tengo pluma y papel cerca.

Estaba hambrienta por una oportunidad y ahora no queda nada más que decir.

Toma un monton de trabajo pensar en lo que quiero describir.

No tiene sentido.

Siento como si garabateara imagenes o boceteara un balbuceo.

Solo movimientos de manos.

Odio pensar que no voy a ser lo suficiente creativa.

Niego cada pequeña cosa que manifieste levemente que no siempre seré artista.

Me rehuso.

Quiero cada centimetro de mi piel, cada coagulo de mi sange, cada segundo de mi vida, cada deso en mi cerebro que lo sea. Arte.

No lo dejaré ser de otra forma, ya desperdicié años dorados en el espectro.

Sea o no sea, supongo ese es el dilema de Hamlet, así que actuaré.

Es cansado sobrepensar cada escena de mi rutina diaria, no quiero que mis más profundas pasiones sigan ese camino.

Pero en paralelo, no reconozco si soy solo yo, mi persona.

Una conducta de personalidad que adquirí al nacer.