Inocentes

Capítulo 50: Tu turno

—Deberíamos matarlo y ya —Apo miró a Neo por el espejo retrovisor cuando dijo aquello.

—¿Desde cuándo vamos por ahí matando a personas? —le contestó con una sonrisa ladeada en el rostro mientras le escuchaba reír.

—No creo que First se sienta muy feliz si el detective es asesinado... —murmuró Bible que iba mirando por la ventana en el asiento de copiloto.

—Lo odia —espetó Neo apartándose su alborotado y colorido cabello—. Y tú también lo odias, deja de ser un hipócrita.

—Tienes razón —aceptó—, en las dos cosas —agregó después en tono pensativo—. Pero le tiene aprecio al hermano menor y no creo que First se sienta muy a gusto si hacemos sentir mal a ese tipo...

Neo chasqueo la lengua al saber que aquello era cierto y prefirió quedarse en silencio.

—Lo que le dije en su departamento era cierto —les recordó Apo—. No le vamos a hacer nada a menos de que involucre a First, y realmente me gustaría que no pasaran por alto lo que acabo de decir... —les dijo en voz seria.

Sabían que no era una amenaza, porque era incapaz de hacerlo eso, ya que eran sus hermanos después de todo, pero eso no significaba que a Apo le gustara que ignoraran lo que les decía.

—¿Y si es por culpa de Barcode? —preguntó Bible mirándolo de reojo—. ¿Qué pasa si es él quien termina involucrando a First? Sabes que ese niño haría cualquier cosa por el detective, y la verdad no estoy tan seguro de que tan leal sea a la amistad que le tiene a First, por si en algún momento tuviera que elegir por alguno de los dos.

Neo volvió a chasquear la lengua.

—¿Qué haremos si eso sucede, Apo? —le preguntó después.

—Ya lo saben, nos hemos protegido entre nosotros desde críos y lo seguiremos haciendo... —Apo realmente esperaba que una situación como esa nunca surgiera, se encargaría de hacer pagar a cualquiera que le hiciera daño a alguno de sus hermanos sin importar las consecuencias.

—Creo que a Tay le hubiese agradado Khao... —Neo murmuró minutos después.

—A Tay le agradaba todo el mundo... —le dijo el mayor con una sonrisa en los labios.

—Solo espero que ese chico no termine muerto —dijo Bible mirando nuevamente hacia afuera—. First no lo soportaría... —agregó después.

—¿Y Ta? No finjas, vi cómo lo mirabas... siempre lo miras como si te lo fueras a comer —acusó Neo a Bible.

—Me gusta hacer rabiar a Barcode —dijo de manera sincera y volviendo a sonreír—, es divertido, sin mencionar el hecho de que Ta podría ser uno de ellos...

—Ese chico no morirá —dijo Apo firme.

—¿Por qué no me habías dicho que los Kanaphan están en la ciudad? —le preguntó Mile a Jeff. El detective lo miró con el ceño fruncido antes de apartarse para dejarlo entrar, eran apenas las seis de las mañana y no había esperado visitas a esa hora.

—¿Por qué debería de decirte? No tiene nada que ver con el caso —murmuró Jeff caminando hacia la cocina y encendiendo la cafetera—. ¿Cómo sabes que están en la ciudad? —le preguntó después pensando en que lo decía como si acabaran de llegar.

—Los vi en la madrugada. Iba saliendo de la comisaria camino a mi casa cuando me los tope, iban en una camioneta oscura —dijo Mile mirándolo serio—. ¿Desde cuándo sabes que están aquí?

—Esto parece un interrogatorio... —le dijo Jeff dejándole ver que sus preguntas no lo intimidaban, solo lo estaba encabronando por haber sido despertado por tal cosa, sin mencionar el hecho de que no quería recordar la 'agradable' visita que había tenido de los Kanaphan más grandes—. Ya te dije que no tienen nada que ver con el caso —repitió.

—Sí, sí tienen que ver, porque fue cuando empezaste a investigar la desaparición de Kitty Kanaphan cuando empezaste a distraerte en el caso y te largaste después de la muerte de Tay Tawan —continuo sin dejarlo zanjar el tema—. Estamos tratando de avanzar aquí, esta vez el asesino ha dejado muestras y no me sirven de nada si vas a distraerte con ellos otra vez —recriminó dejándole en claro sus preocupaciones—. O dime de una vez si tienen algo que ver. ¿Sospechas sobre ellos? —preguntó mirándolo fijamente.

—Apo dijo que tiene un año en la ciudad y la verdad no estoy seguro de que en algún momento hayan salido de la ciudad, los otros dos tampoco es como si se hubieran estado escondiendo todo el tiempo, la ciudad es grande por si no te has dado cuenta, y First siempre ha vivido aquí —le dijo sin contestar a lo último—. El que ellos estén aquí no significa nada y si llegas a encontrarte con alguno de ellos en la universidad o en el departamento es porque obviamente quieren estar al tanto sobre la situación con First.

Mile suspiró profundamente.

—Ya les han contado sobre todo lo que les hemos mostrado a pesar de que dijimos que no podían hacerlo —afirmó—. Ese chico es un dolor de culo... a pesar de que parecía diferente cuando lo vi aquí hace tiempo —Jeff no tardó en recordar que también First había entrado a su departamento sorprendiéndolo por completo—. Y tampoco me dijiste que era First Kanaphan... —Jeff se giró cuando la cafetera anunció que ya estaba lista.

—No, no te lo dije porque seguramente le hubieras dado un tiro o le culparías enseguida por todo esto.

—No, no le hubiera disparado, lo hubiera arrestado por entrar a tu casa sin permiso —dijo antes de girarse—. Podrás ser muy bueno en tu trabajo, Jeff, pero tengo mis años de experiencia y sé leer muy bien a las personas y más cuando las conozco. Ese día tú no sabías que ese chico estaría aquí y te incomodaba que yo estuviera apuntándole, no te dije nada porque su actitud me confundió, pero de haber sabido quien era no me sorprendería que fuera un completo manipulador.

—Te estas dejando llevar por su apellido —le dijo Jeff sin intención alguna por detenerlo.

—No, me estoy dejando llevar por el historial que tiene al igual que por sus hermanos —respondió saliendo de la cocina dejándole al detective un mal sabor de boca.

—Pero en ninguna parte de esos historiales encontraras que son asesinos —subió la voz antes de escuchar la puerta principal cerrarse, estaba seguro de que Mile lo había escuchado.