27 » Debemos actuar

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Para mala suerte de la pareja, su burbuja de perfección, amor y comodidad se rompió al día siguiente, cuando ambos se despertaron bastante temprano porque debían volver a sus trabajos y continuar con el plan.

Como siempre, cada uno se fue por su lado en autos distintos, y cuando Betty entró a la agencia y tomó rumbo a la oficina donde trabajaba con Brett, se cruzó con una castaña.

- Elizabeth. -Donna sonrió amable, aunque parecía querer decir o preguntar algo importante, y así era. - ¿Cómo estás?

- Donna, yo muy bien, ¿Tú que tal?

- Bien... Preguntaba porque se corrió el rumor de que estabas enferma.

- Oh, si, pero no era nada grave. -Betty le quitó importancia. - Solamente una gripe y un poco de fiebre, pero ya estoy mejor. -admitió.

- Me alegra. Ehm... ¿Cómo van con el caso? -cuestionó. - Me enteré de lo que pasó...

Betty enarcó una ceja. - ¿Que pasó?

- ¿No sabes? -la miró sorprendida.

- No... -murmuró confundida.

- Oh... -la castaña bajo su mirada apenada. - No me corresponde a mi decirte, ve con Brett.

- Bueno. -Betty no dijo más nada y continuó con su camino, la curiosidad por saber que había pasado le ganó, por lo que no le dijo nada más a Donna antes de alejarse. Al entrar a la oficina, vio a Brett. - ¿Se puede saber qué pasó? -cuestionó con seriedad luego de entrar y cerrar la puerta tras ella.

Brett hizo una mueca. - Se llevaron a los agentes que teníamos vigilando fuera de la central. -murmuró Brett. - Ya hay otros dos... Pero creo que sabes quién se los llevó.

- Mierda. -Betty maldijo por lo bajo tomando su teléfono. - ¿Cuando?

- En la madrugada. -informó. - Deberias pedir las grabaciones de la central para saber quién fue... Pero estoy casi seguro de que fue ya sabes quién.

- Si, el hijo de puta de Niccola Moretti. -afirmó, luego de marcar el número de su esposo y esperar a que este atendiera.

- Betty. -el atendió luego del quinto tono. - Justo acabo de llegar y ya me enteré. Ya te enviaron la grabación de las cámaras al correo. -informó, sin siquiera dejarla hablar.

Ella sonrió sentandose frente a la computadora para abrir su correo. - Que eficiente.

- Siempre, mi amor. -respondió algo egocéntrico. - Mira las grabaciones, te enviaremos toda la información que encontremos, si necesitas otra cosa, llámame.

- Está bien, gracias, Jug.

El cortó la llamada y Betty escribió en el teclado su clave para luego darle enter y así, su correo electrónico se abrió.

- No le pediste las grabaciones.

- Ya me las envío. -ella se encogió de hombros.

Ella dio play al video de la hora exacta en la que todo pasó. Y justo como ambos esperaban, apareció un Mercedes-Benz negro detrás del auto donde estaban los agentes y bajaron dos tipos armados.

A estos no se les veía la cara, estaban vestidos completamente de negro y un pasamontañas cubría su cara completa.

Claramente los dos agentes intentaron soltarse, y protegerse, pero no pasó mucho tiempo para que sus armas cayeran al piso y los dos hombres vestidos de negro los metieran a la fuerza en su auto, para sin más, irse de ahí.

- Claramente que fueron los italianos... Pero si ellos trabajan con el gobierno, ¿Por qué mierda querrían jodernos el plan para encontrar a Jughead? -cuestionó Brett confundido, cuando el vídeo comenzó a repetirse.

- No lo sé, tampoco entiendo. -Betty admitió. - Está más que claro que el gobierno y los italianos quieren lo mismo: acabar con la mafia de Jughead... No se porque nos sabotearian, no entiendo, no hay ninguna razón. -negó confundida. - Buscaré las grabaciones de la calle porque claramente que no podemos enseñar estas siendo de las cámaras pertenecientes a la central.

- ¡Díganme de una puta vez lo que saben! -exigió el rubio con furia, mirando a los dos hombres frente a él atados a dos sillas.

- Ya le dijimos todo. -uno de ellos, que tenía bastante golpes en la cara y sangre en su nariz murmuró entre la tos y debilidad. - Solo somos dos agentes, al igual que nuestros jefes Brett y Elizabeth.

- No, no. -Niccola soltó una risa irónica. - Ese Brett se trae algo raro, y ustedes tienen que ver con eso. -los señaló. - Y no me sorprendería que esa tal Elizabeth también. -murmuró por lo bajo. - Así que, si tienen un poco de aprecio por su vida, ¡Será mejor que hablen!

- ¡No sabemos nada! -el otro exclamó furioso también, y ante eso, otro hombre que salió de la oscuridad dejó un puñetazo en su mejilla. - No sabemos nada... -repitió en voz baja.

- Solo estábamos ahí esperando algún avistamiento y recolectando información para saber cuándo actuar.

- ¿Me están diciendo que descubrieron hace dos jodidos días la guarida de Jughead Jones y su mafia y hasta ahora no han hecho nada? -preguntó sarcástico. - ¡¿Por qué mierda no han actuado?!

- No lo hacemos si no tenemos el permiso de nuestros mayores, en este caso la agente Cooper, y no lo han hecho porque ya le dijimos, estamos recolectando información. No podemos arriesgarnos a actuar y que Jughead Jones no estuviese allí dentro. -explicó.

Niccola salió disparado de ahí y lo primero que hizo fue tomar su celular.

- Gina, tus queridos agentes están jodiendo todo el plan. - Te recomendaría que los investiguemos a fondo, porque saben de la guarida de Jughead hace dos días, ¡Y no han hecho una mierda!

Cuando cortó la llamada, se acercó a los dos hombres que siempre iban con el, sus guardaespaldas.

- Uccidili. -les ordenó, con un semblante molesto.

- Jughead. -Toni miró con algo de temor al rubio nombrado. - Hay que actuar, ahora.

- ¿Que?

- ¡Se enteran de que no han avanzado el caso! -exclamó obvia. - No sé porqué mierda se llevarían a esos dos agentes, pero está claro que ellos hablarán o ya lo hicieron, y si es así, las sospechas por Brett y también por Betty van a aumentar.

- No... No, aún no podemos, debemos-

- ¡No es una pregunta, Jughead! -exclamó seria. - Debemos actuar. -afirmó.



























BUENO, BUENOO

¿Cómo va? ¿Les va gustando?

Por alguna razón de la nada shipeo a Brett y a Jug, ayuda JAJAJJAJA.

Espero que les guste. 💗

Bye...

Criminal Love | Bughead | +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora