Criminal Love | Bughead | +18

90 » Lo hubiera hecho

- Toni...

La morena estuvo en silencio por unos segundos y el comenzaba a desesperarse. Ya habían pasado los cinco minutos, o estaban muy cerca de cumplirse.

- Toni di algo joder, ¿Que está pasando ahí arriba?

- Jughead...

- ¡Habla! Mierda. -murmuró para si mismo evitando gritar esa palabra.

- ¡Todo está bien! -escuchó la voz de la pelirroja de fondo. - Solo quiere asustarte.

- ¡Era suspenso! Además, me da risa cuando se pone nervioso y cae su fachada de mandón. -se burló Toni.

Jughead rodeó sus ojos. - Deja de jugar, y dime qué pasó.

- Lograron encontrar las cuatro y las desactivaron, pero aún no pueden subir, están revisando todos los rincones de la mansión con un detector de bombas para asegurarse de que no haya más. -informó. - Todo está bien.

- ¿Y el imbécil que las puso, donde está? -cuestionó.

- Reggie y Verónica se están encargando de eso, cuando puedas salir, vienes.

- Está bien, estaré allá. -suspiró. - Llámame si hay alguna novedad y cuando ya podamos subir.

- Está bien, bye.

Cortó la llamada y dejó el teléfono a un lado. Cubrió su cara con sus manos sintiendo un pequeño alivio en su cuerpo, y al voltearse, vió a Betty de nuevo en la puerta.

- Ya sé. -ella soltó al saber que él le daría la noticia, y sin más se acercó y se abrazaron con fuerza. - Pensé que íbamos a perder nuestra casa, Jug.

- No, claro que no. Eso no va a pasar mi amor. -besó su frente. - Ahora tendremos que cambiar a todo el personal, ¿Sabes?

- ¿Y que saben del hombre?

El suspiró. - Ya se están encargando, pero Toni no dijo mucho, supongo que realmente no tienen mucha información al respecto.

- En la mañana yo... Dejé que el entrara. Lo vi, Jug, me dijo que debía hacerle mantenimiento a la ventilación de la mansión y como hacen eso siempre... No me pareció raro. -bajó la mirada. - Perdón, debí decírtelo, no sabía que-

El inmediatamente negó y levantó su cara del mentón. - No, mi amor, no digas nada más. -la interrumpió. - No es tu culpa, no tenías por qué saber. -suspiró. - Ahora tendremos que estar mucho más pendientes de todos los trabajadores de la mansión.

- Hacen revisiones diarias, hay cámaras que también revisan siempre desde la central, ¿Que más se podría hacer?

- No lo sé... Me encargaré de eso cuando volvamos arriba. -la tomó de la cintura. - Buscaré una solución.

- Lo se. -sonrio de lado. - Siempre lo haces.

El también sonrió y besó sus labios. - Con el susto se me quitó el hambre, pero ya volvió, ¿Sabes? Ven, busquemos snacks y vayamos con los niños. -la llevó de la cintura.

•

Casi una hora después ya la mansión estaba libre de cualquier peligro. Revisaron absolutamente cada rincón tanto de la mansión como del terreno que la rodeaba.

Pero al subir, la pareja se sorprendió al ver a Bret en la sala.

- ¿Que mierda haces tú aquí? -preguntó Jughead mirando al rubio.

- ¡Papá! -Liam lo retó.

Jughead suspiró. - Liam, ve a tu habitación y llévate a Siena. -dijo serio, pero le dedicó una pequeña sonrisa. Era esa voz que usaba con él para hacerle saber que iba en serio, pero que no estaba molesto.

Betty se quedó tras su esposo mirándola escena con Noah en brazos.

- Ahora. -volvió a mirar a Bret cuando Liam subió las escaleras con Siena. - Responde, imbécil.

Bret rodeó sus ojos. - Tu mismo me dejaste como jefe de este grupo. -lo señaló.

- ¿Jefe? Y una mierda. -miró a Betty. - Betty, vete ahora mismo con los niños a la central, en un rato los veo allá. -ordenó.

Betty no dijo nada y simplemente le hizo casa. Se escuchaba molesto y sospechaba porque la mandaba a irse con los niños.

Tomó a Bret de la camiseta. - Me parece demasiada casualidad que estés tan insistente con el tema de querer salirte de la mafia, amenazarme con que "lo vamos a pagar" y, que al mismo tiempo uno de mis guardias me haya traicionado y puesto cuatro bombas en mi jodida casa. -estaba murmurando, pero la molestia, la rabia y las ganas de golpearlo se le notaban a leguas. - Y, como si no fuera suficiente, ¿Eres tú quién lidera al equipo que viene a revisar que todo esté seguro aquí adentro para nosotros? ¿Qué casualidad, no? No se con quién debo molestarme más, ¿Contigo o con mis amigos que te enviaron a mi casa?

- Yo no fui. -Bret susurró también molesto. - Si no fuera por mi familia, créeme, lo hubiera hecho sin problemas. -sonrió de lado. - Pero no haría nada sabiendo que los tienes en la mira.

Al escuchar su confesión, soltó un puñetazo en su cara que lo tiró al piso.

"Lo hubiera hecho sin problemas"

¿El idiota de verdad se había atrevido a admitir aquello? En su cara... En su propia casa.

Ah no, esa sí que no la iba a soportar.

Se arrodilló frente a él y volvió a tomarlo de la camisa para levantarlo un poco y que lo viera a los ojos. - Si no te mato ahora mismo, te juro por mi esposa que más nunca en tu vida volverás a ver la luz del sol. -otro puñetazo.

Se levantó y lo soltó con brusquedad, pero al ver que intentó levantarse dejó una fuerte patada en su abdomen que lo hizo quejarse.

Lo miró con una sonrisa retorcida. - Dulces sueños, imbécil. -otra fuerte patada en su cara.

•

Holis!

Espero que les guste. ❤️