La mañana llegó cargada de sentimientos nuevos y determinación.
Baek despertó con su cabeza apoyada en el amplio pecho desnudo de su esposo, se sentía cálido y su palpitar pausado había sido un arrullo durante la noche. No quería moverse ni un milímetro, pero la llamada de la naturaleza era apremiante y el necesitaba orinar con urgencia. Así que, como pudo, se movió despacito hacia un lado y se levantó con cuidado, le dolían los movimientos más que el día anterior, estaba seguro de que esa caída le debió desacomodar los huesos de nuevo.
Justo cuando estaba por salir de la cama, Chanyeol atrapó su muñeca, al verlo, tenía el cabello rojo revuelto, los ojos entrecerrados y una sonrisa perezosa en los labios, fue inevitable sentir que su corazón hacía piruetas, incluso en ese estado, estaba seguro de que su esposo era el hombre más guapo que hubiera conocido.
─¿A dónde intentas escapar? ─preguntó el hombre con la voz rasposa mientras le acariciaba el dorso de la mano.
─Debo ir al baño, cielo, no tardo.
Esa forma de llamarlo le espantó el sueño por completo, la manera más cariñosa en la que solía llamarlo Baekbeom era Yeollie y lo usaba durante el sexo. Uno que otro "daddy" o "señor", y el "querido" canturreado cuando quería conseguir algo.
─¿Cómo me llamaste?
─Cielo. ¿Te molesta? Lo siento.
─No, no te disculpes, me encanta, tú dime como quieras.
─Quiero besarte, pero me voy a hacer pis, ya vuelvo, no te muevas.
Lo último lo dijo mientras caminaba presuroso al baño y Chanyeol soltó una carcajada por lo lindo que se veía al comportarse así, otro par de días de esa adorable personalidad y lo tendría comiendo en la palma de su mano, justo como antes de casarse. No podían culparlo, él era débil ante los encantos de su esposo. Aunque iba a necesitar muchas duchas de agua helada porque dormir abrazado con ese cuerpo caliente y sintiendo su respiración en el cuello, era un castigo para sus bolas.
¿Nada de sexo incluía las mamadas? ¿Una paja rápida? Tendría que preguntarle a Taemin luego.
─Ahora sí, buenos días, cielo.
La manera tan dulce en la que lo dijo combinada con su sonrisa de ojos pequeñitos y esa alegría renovada, le aceleraron el corazón endurecido a Chanyeol; vaya, llevaba muchos años de no sentirse así como un adolescente enamorado.
─Siempre son buenos si puedo despertar a tu lado, amor. Ven y dame ese beso con el que me amenazaste.
Baek soltó una risita y se acercó para besarlo, le encantaban los besos de su esposo, suponía que debía ser una de las razones por las que lo amaba, tenía muchas, las estaba enumerando en su cabeza. Él tuvo un sueño la noche anterior en el que estaba rodeado de muchos niños, todos corrían y jugaban haciendo gran alboroto, pero no le molestaba, al contrario, encontraba confort y alegría en esas escandalosas risas. Pensó que debía ser un anhelo escondido por tener más niños en la casa.
Hubo un momento durante la noche en el que se despertó y se quedó pensando en lo que era su vida. Llegó a la conclusión de que debía ser un consentido de los dioses porque él tenía una vida soñada. No es que supiera mucho de las aspiraciones de los demás, pero él tenía a un esposo guapo, millonario, cariñoso, atento y un completo caballero que siempre lo protegía; una hija preciosa, dulce, alegre e inteligente; una casa enorme y lujosa, seguramente nunca tenía preocupaciones de dinero; y le habían dicho que tenía padres amorosos también, los conocería cuando regresaran de su viaje.
Era una vida perfecta, él tenía todas las razones del mundo para ser la persona más feliz del planeta, así que había decidido luchar contra sus miedos, las personas que lo arrancaron de su hogar y quisieron quitarle esa dicha, no lo iban a conseguir, él se iba a reponer, incluso si nunca podía recuperar sus recuerdos, estaba seguro de que podría crear nuevos e incluso más felices con su preciosa familia. Así que se iba a dedicar a amarlos mucho y a disfrutar del regalo de tenerlos.
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🔫LOVE SHOT🔫 [Serie Salento - Libro 1]
RomanceBaekbeom tiene una vida soñada, se casó con el apuesto empresario Park Chanyeol, tienen una preciosa hija y él puede derrochar lujos a su antojo. Aun así, está tan cansado y aburrido de su rutina que encuentra consuelo en los brazos de un sensual mo...