¿Qué me estás haciendo, nene? ||KOOKMIN||

Capítulo 71.-

POV JUNGKOOK

Me desconozco. No soy yo. Pero no me desagrada en lo absoluto. Jimin saca de mí cosas que ni sabía que existían en mí ser. Es sólo verlo en su papel de asistente y morirme por dentro por tenerlo cerca mío, por besarlo y acariciarlo. Quiero mantener la compostura en la empresa, pero simplemente es más fuerte que yo. Necesito besarlo, pero no quiero hacerlo como las otras veces, no quiero un beso robado y lujurioso, hoy no quiero eso. Claro que todo su exquisito cuerpo me enciende, pero hoy deseo sentirlo despacio, lento, con calma. Hoy no me importa su trasero, hoy me importa sentirlo cerquita de mi cuerpo, cerca de mi pecho.

Podría besarlo durante todas las horas que dura nuestra jornada en el bufete. Pero quiero mantenerme calmo porque ya tomé mi decisión. Quiero intentarlo; no sé cómo, ¡joder ni siquiera sé si él quiere lo mismo!. Tampoco sé si funcionará, todo en mí es nuevo con Jimin, no tengo la más puta idea de lo que significa "intentarlo"; pero si lo hacemos despacio, paso a paso, quizás resulte algo bueno. Ya me importa muy poco cual es mi orientación sexual; suena gracioso pero si alguien me preguntara en este momento mi respuesta sería: "Soy Jiminista". Es que en verdad, al carajo las mujeres y también el resto de los hombres; es Jimin y sólo Jimin. Y quizás me esté apresurando con esto, pero ya no tengo dudas. Me estoy enamorando de Jimin y no voy a dejar pasar esta oportunidad, porque quizás no funcione, quizás no lleguemos lejos, pero no me voy a privar de vivir esta experiencia. Solo debo saber cómo actuar frente a la gente, me atemoriza un poco la idea de soportar críticas sobre un asunto tan íntimo... pero no quiero pensar en eso ahora. Sólo debo pensar en cómo decírselo a Jimin.

Y como todo con Jimin surge naturalmente, nuestra ¿cita? es más que relajada y divertida. Es que no necesito fingir cuando estamos juntos, puedo ser yo en toda mi esencia. Si alguien me viera haciéndole cosquillas en medio de la calle no creería que soy yo.

Siento angustia cuando me cuenta de su sueño frustrado con la danza por culpa de su padre, y no puedo evitar la culpa que aún me carcome por dentro por haber sido tanto tiempo un cerdo homofóbico. Jungkook, Jungkook... ¿Quién te ha visto y quien te ve? Pero me aseguraré, sabe Dios que lo haré, de que Jimin cumpla ese sueño a como dé lugar; conmigo o sin mí en su vida, lo logrará; porque realmente lo merece y porque yo sería feliz si él lo fuera.

Nunca me he sentido tan nervioso, ni siquiera frente al tribunal. Pero es que todos le tememos a lo desconocido, y yo jamás me he declarado a nadie. Aunque a decir verdad tampoco sé si se hace de este modo. Quizás debería haber comprado flores y proponerle claramente: "sé mi novio". El problema es que no sé cómo hacer esto, y me aterra ponerle un título tan importante a algo que no sé cómo se desenvolverá. Si, hoy puedo decir claramente que el gran Jeon Jungkook es un cobarde; puedo comerme el mundo con las leyes bajo el brazo, pero no con Jimin, el destruye todo lo conocido para mí.

La sonrisa de Jimin, su sonrisa tan dulce, me confirma que lo quiere tanto como yo, y mejor aún, que siente lo mismo que yo. No sé cómo hemos llegado a este punto, pero sé que a partir de aquí ya no quiero retroceder, por nada ni por nadie.

El día de la fiesta ha llegado y trato de verme lo mejor posible. Es irónico como uno cambia hasta su propia percepción cuando quiere gustarle a alguien. Nunca me he preocupado por eso, para ser sinceros. Pero Jimin tiene belleza natural, así que debo esforzarme con la artificial para estar a su altura.

Aunque claramente es imposible. 

Jimin sale de su departamento hacia mi encuentro en el coche y yo creo que si no cierro la boca se me caerán las babas. Es que se ha peinado con el cabello para atrás y ese traje color vino no puede sentarle mejor. Será la atracción de la fiesta, ahí es donde deberé tener atención; creo que no soportaré la mirada libidinosa de los jueces sobre él.