¿Qué me estás haciendo, nene? ||KOOKMIN||

Capítulo 79.-

POV JUNGKOOK

La espalda de Jimin nunca se sintió tan suave antes, su cuello nunca antes fue tan llamativo como ahora y no había sentido hasta hoy la perfección de su cintura. O quizás sí, pero tal vez es la necesidad que tuve todos estos días de tenerlo cerca que me hace percibir todo su cuerpo de manera más maravillosa que antes.

El funeral de mi padre me dejó exhausto ayer, física y emocionalmente. Es cierto que, desde aquel día en el hospital, he tratado de hacer un buen trabajo mental para prepararme para lo que sabía que ocurriría; pero también es cierto que nunca se está preparado al ciento por ciento para la pérdida de un ser querido. Podríamos haber tenido una mejor relación, claro que sí. Pero fue lo que me tocó, y al fin de cuentas era mi padre; uno que definitivamente no llegué a conocer ni por la mitad y de cualquier manera ya no sirve de nada quejarme de su desempeño como padre; ya no está... lo único que está en mis manos es aprender de él, de lo bueno y de lo malo que ha hecho.

Gracias al universo con Jimin hablamos de todo y pudimos aclarar las cosas; todas las cosas. Él no tiene ni idea de cuánta falta me hizo estos días e incluso cuanta falta me hace ahora, aun estando aquí conmigo. Estamos pasando por situaciones difíciles, ambos. Pero pasarlas juntos es mucho más fácil, más liviano.

Despertar a su lado siempre será la manera más dulce de comenzar el día. Pero estar en la tina con él, definitivamente es mi manera favorita. No puedo resistirme al oír el ruido del agua moviéndose, sabiendo que mi nene está allí, desnudo y sin mí. No se siente correcto, ¡claro que no!

En cambio ahora sí, ahora está bien y es correcto. Jimin tiene su espalda mojada apoyada en mi pecho, nuestras piernas enredadas debajo de la espuma y amo la sensación de paz que nos dan nuestras respiraciones acompasadas; me atrevo a decir que es el momento más íntimo y romántico que he experimentado. Ambos con nuestros ojos cerrados y disfrutando de la calidez de nuestros cuerpos juntos.

Y como las caricias en su espalda delineando su tatuaje de lunas no me bastan, les doy permiso a mis manos de que tengan la libertad de recorrer el cuerpo de Jimin; me dejo llevar por la sensación de suavidad bajo mis dedos y no hay recoveco de su cuerpo que no quiera conocer. Es inevitable excitarme, ¿Quién podría evitarlo con Jimin así, aquí? De pronto me encuentro besando con ahínco este cuello que quiero oler toda la vida; mientras una de mis manos estimula su pezón y la otra acaricia sus costillas, allí donde sé que le encanta. Jimin pasa entonces de la relajación extrema a la excitación, pero sin desespero. Sólo disfrutando de mis toques y yo creo que nunca antes reparé exactamente en el tono de su voz; definitivamente es la voz más hermosa que haya escuchado, pero su garganta emitiendo suaves gemidos y jadeos es la gloria.

Jimin toma una respiración profunda, y con determinación gira en la tina y se coloca a horcajadas sobre mí. La sensación del agua, la espuma que no nos permite mirar más allá y pone a pruebas la imaginación, sus pezones duros contra mi pecho, sus labios esponjosos recorriendo mi mandíbula y su trasero rozando mi polla es el combo más perfecto. La imagen frente a mi es realmente deliciosa. Él está aquí sobre mí, mojado, desnudo, excitado, frotándose en mi buscando más cercanía, acariciándome y besándome como nunca nadie antes. Nuestras bocas se unen en un beso desesperado, un beso que muestra que nos extrañamos, un beso que pide perdón, un beso de necesidad, y nuestras lenguas se sienten tal y como el primer día; luchando por recorrer toda la boca contraria sin perderse un solo rincón.

— Amo tu piel Jimin, eres tan suave, tan delicado... me encantas bebé—

— Yo amo tu cuerpo entero Jungkook, eres tan fuerte; me siento protegido cuando estoy contigo—