¿Qué me estás haciendo, nene? ||KOOKMIN||

Capítulo 58.-

POV JIMIN

Si alguien me hubiese dicho que hoy Jungkook cenaría con nosotros, el menos me hubiera arreglado mejor. O quizás habría tenido tiempo de apalabrar a Tae y Yoon para que no quieran comérselo durante la cena.

Por suerte se destensa un poco todo y la noche es más que agradable, no sólo estoy con mis amigos de siempre, sino que ahora tengo aún más y estoy feliz con eso; aunque no sé si Jeon aplica como amigo, pero también estoy feliz de que esté aquí compartiendo conmigo... con nosotros.

He quedado más de una vez colgado mirando a mi jefe, pero es que... ¿acaso no sabe que es perjudicial para la salud, para MI salud, andar por la vida portando esa ropa casual y ese piercing en el labio? Joder, que es imposible no tener pensamientos obscenos con esta vista que tengo de sus labios, entre su lunar y su arete creo que me voy a volver loco.

En verdad no quiero irme en taxi porque ya se ha hecho tarde, pero tampoco quiero irme con Jungkook porque la situación se tornaría rara, aunque parece que todos quieren que me vaya con él porque no dejan de insistir.

Pero una vez en el coche, no puedo evitar hacer un comentario sobre el adorno de su boca que me voló la cabeza toda la puta noche. Y no lo soporto más y me tiro a su boca; deseo tanto, pero tanto besarlo.

El me responde de la misma manera que yo, fogoso y pasional; el beso sube de tono y yo me siento totalmente excitado, quizás por virgen, quizás solo porque es él quien me besa, pero siento que besarnos no basta, quiero un poco más.

Sé que el camino que toma es hacia su departamento, pero no me importa en este momento. Podría decirle que no; podría decirle que me lleve a lo de Tae; pero mi mente está nublada de pensamientos lujuriosos y no quiero perder esta oportunidad. Simplemente quiero dejarme llevar.

Nunca pensé excitarme tanto en tan solo un momento; sentirme abrazado a él con las manos y las piernas estilo koala y besándolo desenfrenadamente, me hace pensar que podría vivir y morir así, peor aun cuando chupo su cuello cerca de su oreja y noto que se estremece entero.

Me siento caliente, me siento descarado; siento que todo mi pudor se ha ido al tacho y solo quiero dejar que haga conmigo lo que le plazca.

En el momento en que toma mis manos por sobre mi cabeza, siento una especie de juego de dominación-sumisión y juro que me fascina; pero nada comparado a él recorriendo mi cuello con su lengua y dejando rastros de saliva por toda mi mandíbula.

Y pienso que no puedo calentarme más, pero Jungkook me mata de ternura cuando me desabrocha la camisa y me mira como esperando mi permiso para lamer y morder mi pezón y yo lo único que puedo hacer es gemir y gemir, el deseo que siento es intenso, solo puedo pensar en que quiero que nos saque la ropa a ambos y se adentre en mi de una vez. Nadie ha llegado tan lejos como para poder sentir piel con piel, nunca nadie me ha visto en esta situación sin ropa; pero ver que sus ojos derrochan lujuria me hace querer darle todo de mí, todo lo que pida.

Quiero acariciarlo, tocarlo, recorrerlo; pero soy tan inexperto que temo que cualquier movimiento arruine el momento, así que solo me relajo y dejo que el haga de mi lo que quiera.

Los besos son hambrientos, calientes, sedientos; las lenguas se rozan continuamente explorando la cavidad bucal del otro y mi polla necesita urgentemente ser liberada de mi ropa antes de que acabe dentro de mis pantalones; pero no creo soportar mucho más, no cuando veo a Jungkook sacarse la camisa... por favor... es un Dios, en verdad es un Dios, su cuerpo está tan marcado, tan fuerte, tan fibroso, no puedo evitar mirarlo lujuriosamente porque lo único que tengo en mente es eso, deseo, lujuria, pasión.

Su lengua que está bordeando mi ombligo en círculos me está enloqueciendo y yo quiero detenerlo porque creo que esto va más allá y no sé cómo hacerlo; pero cuando siento la humedad de su boca más abajo, sobre el inicio de mis jeans, vuelvo a rendirme y entregarme por completo; el deseo es más fuerte que cualquier otra cosa racional en este momento; solo deseo que me coja, que se meta en mí y no salga nunca más, quiero sentirlo gemir, quiero tenerlo todo para mí. Y como sabiendo mis pensamientos, Jungkook me baja pantalón y bóxer sorpresivamente y después de mirar mi polla casi con admiración, comienza a masturbarme en un vaivén taaaaan lento que juro que me hará acabar por una eternidad. Mi miembro ha dejado salir líquido pre seminal a montones, así que su toque es mucho más caliente aun. Amo lo que me hace, pero amo mucho más ver que él se excita sólo con tocar y besar mi cuerpo, me hace sentir deseado y eso solo hace aumentar mi desesperación.

Pero él va por más, va por mucho más... y yo me tenso un poco cuando noto que baja toda su propia ropa inferior y de adentro sale disparada su enorme polla. Joder que se me hace agua la boca y aunque nunca haya practicado un oral, tranquilamente podría comenzar a aprender desde ahora chupando esa gorda y venosa... pero mierda que puede llegar a romperme todo.

Y entonces entro en pánico porque el parece ser un experto en esto y no le he dicho aun que soy un pobre virgen.

Sé que si lo hago, todo se detendrá y no quiero, en verdad quiero que pase, quiero que sea él mi primero. Pero necesito que lo sepa antes, para que entienda porque soy inexperto.

El detiene sus movimientos cuando se lo digo y pienso que se pondrá de pie o incluso que podría molestarse por interrumpir esto; pero por el contrario...

— Ah Jimin, nene... ¿es en serio?—

— S-si... lo siento yo...—

— No no... por favor no te disculpes Jimin. Lo siento si he ido demasiado lejos y te he incomodado, yo p-pensé que tu—

— No, no lo he hecho, ni siquiera he llegado tan lejos antes, pero no me has incomodado Jungkook, quiero esto... solo que... solo que no sé cómo hacerlo— Me siento un poco avergonzado, pero la mirada de Jungkook es tan tierna en este momento...

— Jimin... tampoco sé cómo hacerlo, pero no quiero que nos quedemos así... solo... solo relájate si... no haré nada que no quieras, tu solo dime si quieres que pare y te prometo que lo haré—

Solo asiento y Jungkook vuelve a su labor de masturbarme asiduamente como lo hacía antes... soy un mar de gemidos y la imagen que tengo frente a mi es monumental, todo su cuerpo me apetece, todo él. En un momento él se pega más a mí y junta su polla con la mía y yo solo puedo observar absorto en lo que estoy sintiendo. El roce de ambos miembros hirviendo y llenos de pre semen me está haciendo delirar... Jungkook comienza a gemir cada vez más fuerte y no deja de mirarme a los ojos un solo segundo mientras nuestras caderas se mueven frenéticamente buscando lograr más contacto. La imagen de este hombre totalmente sudado, moviéndose así, con sus cabellos pegados a su frente y sus grandes manos sosteniendo ambas pollas es agonizante, peor aun cuando veo que deja caer un chorro de saliva de su boca directo a nuestros miembros para lograr mayor lubricación. Y no aguanto más, y exploto en su mano. El orgasmo se forma rápidamente en mi vientre y me ataca sin piedad y creo que nunca ha salido tanta sustancia de mi polla. No puedo dejar de gemir, casi creo que estoy gritando mientras mis uñas se clavan en el colchón y Jungkook no se detiene en sus movimientos. Unas tres jaladas más es el turno de Jungkook y es la imagen más erótica de mi vida verlo gemir mientras llena ambos abdómenes de su leche y grita mi nombre para luego susurrar:

— Ah... ¿qué me estás haciendo, nene? —