Seonghwa
No sé cómo terminamos así, al principio solo era unas charlas triviales acerca de nuestra vida, no era nada significativo hasta que nos pasamos de tragos y terminamos en la misma cama. Aunque he intentado parar esto no he podido, creo que sea vuelto costumbre.
— Vamos a la habitación — me susurró Seungmin en el oído.
Agarré su barbilla con fuerza para acercar su rostro al mío, sé que le encanta que lo trate así, en sus ojos se ve.
— Eres toda una perra al menos intenta hacerte el difícil — dije.
Sus mejillas se colocaron rojas, estas cosas le excitan, lo sé, la forma en la que mira mis labios demuestra que me desea.
— Nunca me puedo resistir a ti — susurró.
Sus labios carnosos y su rostro sonrojado le daba una imagen angelical que me estaba excitando, de inmediato agarré su brazo y lo arrastré a la habitación que era testigo siempre de nuestras locuras.
Cerré la puerta con seguro y lo tiré en la cama sin cuidado porque sé que le gusta así, rudo.
— Quítate la ropa — le ordené.
A lo que obedeció aun más sonrojado, bajó sus ojos al suelo con vergüenza mientras despojaba de su cuerpo cada prenda.
Seungmin aparenta ser antipático y grosero, dominante en muchos sentidos pero realmente en la cama desea que lo hagan enloquecer. Cada vez que vengo a este bar noto las miradas de los chicos en él pero este siempre rechaza a todos.
¿Por qué a mí no? Eso sinceramente no lo sé, aquel chico de ojos azules es difícil de entender.
Su cuerpo estaba desnudo ante mis ojos, su piel bronceada, sus pezones rosados, cintura pequeña y muslos gruesos podría volver loco a cualquier chico de afuera pero solo yo puedo disfrutar de esta maravilla.
— Sube a la cama y abre las piernas para mí — le ordené.
Me acerqué al cajón y cogí lubricante con condones antes de comenzar a quitar la ropa, la forma en la Seungmin está dispuesto para mí, cómo me miraba con ganas de tirarse encima de mí solo demostraba lo mucho que me deseaba.
— ¿Te has acostado con alguien está semana? — le pregunté mientras me subía a la cama.
Ya no había ni una prenda que tapara mi desnudez, estaba más que excitado al ver a este chico de ojos azules mordiéndose aquellos labios carnosos y aquella entrada rosa contraerse.
— Responde — exigí.
Abrí aún más sus piernas antes de comenzar a esparcir el lubricante por su miembro.
— Mmm... ya te dije que desde que comencé a acostarme contigo no dejo que más nadie me toque — dijo este tratando contener sus jadeos.
No me gustan las sobras, si tengo algo me gusta ser el único dueño aunque esto solo signifique una amistad con derecho.
ESTÁS LEYENDO
Desviado² - Hyunlix
RomanceLee Félix es un estudiante de psicología que es muy estricto cuando quiere conseguir las mejores notas y por esa simple razón su profesor de Psicometría se vuelve su principal dolor de cabeza. Hwang Hyunjin un profesor terriblemente odiado y deseado...