Desviado² - Hyunlix

53 - Ya no soy el único desviado de esta habitación

Seungmin

— ¿Por qué estás triste? — me preguntó Eunchae mientras pintaba mis uñas.

Le costaba sentir el tacto durante mucho tiempo y esto de pintarme las uñas la ayudaba de forma directa a sentirse más segura.

— La persona que me gusta ya tiene alguien más... — Eunchae no me dejó continuar.

— Te gusta Seonghwa y él gusta de ese tipo odioso — resumió mis problemas.

Bueno le faltó el hecho de mi padre, pero tampoco es adivina.

— Tú con 11 años notas mis sentimientos y él sigue pensando que lo quiero como un hermano, no sé por qué te cuento esto... Supongo que no son problemas de los que te tienes que preocupar — dije recordado que estaba hablando con una niña.

En serio envidio a Felix tiene un novio lindo que siempre anda pendiente a él y tiene a Eunchae mientras yo... no tengo a nadie estoy solo.

— Cada vez que preguntaba mi familia decía que los príncipes tienen que buscar princesas, pero algo dentro de mí dice que eso no tiene que ser así, sé que soy pequeña aún para entender muchas cosas, pero algo tengo claro, eres lindo y amable mientras JunHan es malo así que no tienes que envidiarle nada — me animó.

Ojalá todos pensará como Eunchae la vida sería más fácil y tendría más amigos.

— Me vas a hacer llorar... me da ganas de tener una hija cuando te escucho hablar así — lástima que a este paso morir solo con peluches porque soy alérgico a los gatos y los perros.

Eunchae se alejó de mí y busco algo en su mochila era una hoja, se apresuró y me la entregó era un retrato mío... no perfecto, pero hermoso en serio está niña tiene talento.

— Podemos ser amigos... no tengo muchos amigos, pero me agradas — me confesó la pequeña. Esto es raro ella tiene 11 años y yo casi 25 años, pero realmente me entiende más que cualquier psicólogo.

— Nunca he tenido un amigo... ni siguiera sé que debo hacer — admití.

Las únicas personas que estuvieron a mi lado se alejaron, Minho está con Jisung y ahora
Seonghwa está con JunHan.

— Solo tienes que ser tú y comprarme dulce — dijo esto en tono de burla.

Inocente aún lo es, desearía volver hacerlo, pero mi padre se encargó de destrozarme por dentro hasta el punto que no dejo de pensar en cosas muy turbias en mi cabeza.

Felix

Me levanté de la cama asustado al ver que solo estaba yo en ella, lo confesó me imaginé el típico cliché, pero esa idea desapareció de mi cabeza al escuchar ruido en el baño.

Me levanté con dificultad de la cama me dolía todo el cuerpo no sabía que tener sexo podía dejar tan agotado y adolorido pero al mismo tiempo con ganas de más.

Abrí la puerta del baño y ahí estaba Hyunjin dándome la espalda, limpiado su cuerpo mientras mis ojos bajaban con descaro a su parte trasera, lo admito me gusta cada milimelitro de su cuerpo, su espalda ancha llena de lunares que te dan ganas de tocarlo uno por uno... ¿Cálmate antes de que tengas un problema! Me acerqué a él por primera vez siendo cociente que yo también estaba desnudo.

— Pensé que escaparías — susurré a pocos metros de distancia.

Las gotas de agua me alcanzaban a mojar lo cual me hacía estremecerme porque el agua estaba muy fría.

Se volteó y me miró de arriba abajo con una sonrisa de superioridad ¿Por qué se ve tan malditamente bien? Enserio soy muy pervertido.

— Mírate al espejo y dime si en tu cuerpo ves algún rastro de que me quiera ir de tu lado — me susurro con tono de voz muy ronco.

Me acerqué al espejo ahora entiendo a lo que se refería, efectivamente en mi cuerpo había evidencia de lo que hicimos ayer, manchas rojizas adornan casi todo mi cuerpo logrado una imagen lujuriosa.

— ¿Qué significa esto? — dije confundido.

Me gusta enserio me gusta, pero no quiero ilusionarme con alguien que no tengo posibilidades no quiero que me pase lo mismo de nuevo.

— No soy gay... realmente no tengo claro que soy, pero estar contigo no me disgusto para nada, quiero repetirlo y probar partes de ti que ni tú te imaginas — confeso un poco confundido.

Me acerqué a él con incomodidad por agua fría que comienza a tocar con más intensidad en todo mi cuerpo.

— Yo tengo claro una cosa — dije mientras bajaba mi mano para tocar su miembro que estaba comenzando a crecer por mi toque, lo mire a los ojos y me mordí el labio al ver a este estremecerse a mi toque — Ya no soy el único desviado en esta habitación — me burlé antes de arrodillarme para cumplir unas de mis fantasías.

Tener sexo en el baño.