Lee Félix es un estudiante de psicología que es muy estricto cuando quiere conseguir las mejores notas y por esa simple razón su profesor de Psicometría se vuelve su principal dolor de cabeza.
Hwang Hyunjin un profesor terriblemente odiado y deseado...
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Félix
Hyunjin me pidió que lo esperara en su oficina, fue acostar a Eunchae a su habitación mientras yo pensaba en lo que probablemente me diría y no se me ocurría nada bueno ¿Y si me dice que lo deje en paz que no me meta más en su vida? No quiero eso, no lo quiero. La puerta de la oficina se abrió dejando ver aquel hombre que ha causado tanto caos en mi vida.
— Me gustas Lee Félix y esto es muy confuso para mí porque eres un chico y hace unos meses eso era algo imposible de imaginar para mí, estoy lleno de prejuicios y de ideas conservadoras además de tener a mi padre en mi contra no quiero que cargues con eso — me confesó.
Yo solo escuché "me gustas Lee Félix" juro que estoy saltando en mi cabeza porque nunca pensé que aquellas palabras saldrían de mi cabeza.
— Sé que estar contigo no es fácil y créeme que estar conmigo tampoco lo será ¿Pero no te quieres arriesgar? — dije mientras me acercaba a él.
Desde el principio te odié por verme como un desviado, pero ahora es diferente.
— ¿Estás seguro de que me quieres a tu lado? Por qué si es así no te dejaré escapar — dijo mientras acariciaba mi mejilla.
Asentí, estoy más que seguro.
— No quiero escapar de tu lado — susurré antes de abrazarlo.
Mis pies se enredaron en su cintura y mis manos en su cuello.
— Cuando vi que eras tú él que tocaba la puerta solo se me pasó por la cabeza que quiero tenerte para siempre — susurro antes acortar la distancia de nuestros cuerpos.
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Seungmin
Ver una película es lo que menos quiero hacer ahora, me senté en el regazo de Changbin y este me miró con curiosidad, se que es muy apresurado, pero llevo semanas si tener sexo necesito hacerlo mi cuerpo lo necesita y tener a esta tentación a mi lado es mucho.
— ¿No te gusta la película? Puedo cambiarla — dijo mientras acariciaba mi mejilla con cariño.
Con mis manos comencé a desabrochar su camisa y este me detuvo de inmediato.
