Lee Félix es un estudiante de psicología que es muy estricto cuando quiere conseguir las mejores notas y por esa simple razón su profesor de Psicometría se vuelve su principal dolor de cabeza.
Hwang Hyunjin un profesor terriblemente odiado y deseado...
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Seungmin
Una semana, llevamos practicando una coreografía que se me ocurrió, pero a Changbin se le dificulta seguir mi ritmo, baila muy robótico y eso me tiene mal.
— Tomemos un descanso, Sorn traemos algo de tomar — le pedí a la chica que nos miraba enseñar.
Ella obedeció y fue en busca de alguna bebida, espero que sea sin alcohol porque estoy tomando pastillas.
— ¿Alguna vez te has enamorado? — le pregunté y este negó — Con razón que no puede transmitir el sentimiento, imagínate que encuentras a alguien, alguien que te haga olvidar de todos lo que están al tu alrededor, alguien que te piense aún teniendo a gente rodeándolo, alguien que te cuida sin que tú se lo pidas, alguien que es tu sombra sin ser tenebroso, amar es aprender a respirar cuando te estabas ahogado — le expliqué.
Este me miró confundido.
— ¿Estás enamorado? — me preguntó.
Asentí, Seonghwa en tres años logro algo que ni Minho logro, él logró que le encontrará sentido a mi vida una razón para no acabar todo.
— Si, pero no algo correspondido — confesé.
— Tú eres amor y yo soy el deseo, no sé cómo amar, pero si sé cómo desear a alguien, no se trata de demostrar un teatro de pareja, se trata de trasmitir ¿Entendí bien? — pregunto.
Asentí, Sorn nos regaló agua y volvimos a la pista tratando de coordinar está vez.
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Estoy agotado, hoy salió un poco bien, pero no es suficiente, hay que esforzarnos más, estaba tan metido en mis pensamientos que no me di cuenta de que Changbin cambio el rumbo de nuestro camino en el carro.
— Joven respire un poco y actúe tranquilo, hay un carro que nos lleva siguiendo desde la mañana, creo que lo mejor será que hoy nos quedemos en otro lado mandaré a algunos contactos que tengo a qué vigilen su casa — me avisó Changbin.
No me queje, solo quería llegar a un lugar seguro.
— Bajemos — me pidió.
Dejamos el carro en una esquina y nos subimos a autobús.
