𝐿𝒶 𝓉𝑒𝑜𝓇í𝒶 𝒹𝑒𝓁 𝒶𝓂𝑜𝓇 ~ [𝒥𝒶𝒹𝑒𝓃 𝒲𝒶𝓁𝓉𝑜𝓃]

Treinta y ocho

MÍA

El clima estaba cálido, y el cielo se veía hermoso a través del trayecto.

-¿Adonde vamos?.-pregunté por tercera vez.

-Ya te lo dije, es un restaurant que no conoces.-Jaden rió rodando los ojos.

Al cabo de unos minutos llegamos al lugar, Jaden estacionó la camioneta y ambos bajamos para entrar al restaurant.
A diferencia de los restaurant que habíamos frecuentado con la familia Walton que era con temática lujosa, este ere más pequeño, pero era precioso.

Las luces del lugar eran cálidas, las paredes estaban repletas de arte, habían personas leyendo, comiendo, compartiendo, y se encontraba un grupo de Jazz presentándose en vivo con melodías de Disney.

-¿Te gusta?.-escuché la voz de Jaden a mi lado mientras yo observaba todo.

-Me encanta.-volteé a verlo para abrazarlo.-Es hermoso este lugar.

Jaden tomó mi mano para que camináramos a una de las mesas y nos sentaramos para pedir la comida.

-Jaden, esto es maravilloso, gracias por todo, casi me haces llorar con tu publicación en twitter.-hablé en cuánto nos sentamos.

-Te mereces esto y mucho más, por eso aún falta.-el sonrió guiñando uno de sus ojos.

-Necesito que me digas que pasará luego de esto, no puedo con la ansiedad.-me quejé y el rió.

-Todo es sorpresa, lo siento.-Jaden se encogió de hombros.

-Me estás matando.-negué con mi cabeza.

-Tu solo disfruta.-Jaden tomó mis manos encima de la mesa y las acarició lentamente.

Al cabo de unos minutos nuestros platos llegaron, ambos pedimos unas pastas, y el restaurant por ser mi cumpleaños, nos regaló un postre de chocolate.

El almuerzo fue genial, la comida estaba exquisita, y Jaden conversaba de muchos temas diferentes para que yo logrará dejar de pensar en lo que vendría después.

Jaden era de esas compañías que te hacían perder la noción del tiempo, siempre tenía tantas cosas de las cuales hablar o era tan genial escuchándome, que todo se sentía extremadamente bien con el.

Así mismo fue cuando sin darme cuenta habían pasado más de horas.

-Ahora viene la otra parte del panorama.-dijo Jaden mientras pedía la cuenta para pagar.

-¿Cuantas partes son?.-mi curiosidad volvió a florecer.

-Tres.-el sonrió viéndome de reojo.

-¿Tres?.-alcé un poco mi voz sorprendida.-No puedes hacerme esto.

-Valdrá la pena.-me miró con una de sus sonrisas tranquilizadoras y suspire copiando su gesto.

Salimos del restaurant y subimos a la camioneta, Jaden me miraba con una media sonrisa, y como siempre, puso música de Lana del Rey, según él le gustaba verme cantar sus canciones.

En el camino íbamos hablando sobre sus partidos próximos de béisbol, aunque podía notar a Jaden un poco nervioso.

Nos tardamos alrededor de media hora en llegar al lugar, y en verdad no lo reconocí, no sabía donde estábamos. Solo veía mucho pasto, mucho árbol, y a lo lejos podía divisar un lago.

-¿Y este lugar?.-pregunté bajándome de la camioneta.

-Caminemos.-Jaden estiró su mano para que yo la tomara, y sin pensarlo lo hice.

Comenzamos a caminar tomados de la mano por el gran espacio de aquel lugar, el atardecer ya teñía el cielo de un anaranjado precioso.

-Mía..-habló depronto Jaden y yo lo miré.