Sesenta y seis

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MÍA

Luego de que Jaden me dejará en mi departamento, me dirigí directamente a darme una ducha de agua caliente, posterior a eso sequé mi cabello, me puse ropa cómoda, y me acosté logrando quedarme profundamente dormida.

Siendo completamente sincera, no planeaba dormir tanto, pero haberme trasnochado la noche anterior me tenía muy cansada y con mucho sueño. Producto de esto, es que desperté a las seis de la tarde, gracias a las reiteradas llamadas de Jaden.

-¿Hm?.-respondí la llamada algo dormida.

-Dios mío, ¿estás bien?.-habló Jaden a través del teléfono con un tono preocupado.

-Lo siento, me dormí.-dije rápidamente logrando despertar por completo.

-¿Enserio? ¿desde que te vi por la mañana?.-respondió Jaden.

-Si.-reí.-Osea, me duche y eso me relajó mucho creo, que me dormí.

-Si te sientes muy cansada podemos dejar la cena para otro día, no te preocupes.-dijo Jaden en un tono calmado.

-No, no.-negué con mi cabeza aunque no pudiese verme.-Ya dormí suficiente, me levantaré y me alistaré.

-¿Segura?.-Jaden no sonó tan convencido.

-Segura.-afirmé.-A las siete te veo.

-Ok, a las siete estaré allí.-escuché una pequeña risa de Jaden.

Luego de despedirnos en la llamada, corrí al baño para arreglar mi cabello y alisarlo. Me maquillé con algo sencillo pero que llamará la atención, el infaltable delineado además de agregar máscara de pestañas, y un labial de tonalidad rojo.
Y para la ropa, decidí ponerme un top rojo para que combinara con mis labios, unos jeans negros y mis usuales zapatillas nike blancas.

Una vez lista, me apliqué cremas y mi perfume, para luego alistar mi bolso con lo necesario.

Sentí el sonido del timbre en mi puerta, miré la hora, 19:00 en punto, Jaden es demasiado puntual cuándo quiere.

Tomé mis cosas y fui rápidamente a la puerta para abrirla, y ver tras ella a Jaden de pie, con una camisa de color blanca y unos pantalones de tela delgada también blancos, además de unas zapatillas de un tono beige.

-Hola.-Jaden me miró detenidamente de pies a cabeza con una media sonrisa.

-Hola.-sonreí sintiendo mis mejillas arder.

-¿Vamos?.-dijo Jaden sin dejar de verme.

-Si, claro.-asentí con una risa nerviosa y salí del departamento para bajar junto a él.

-¿Donde vamos?.-preguntó Jaden una vez entramos a su camioneta.

-A esta dirección.-le mostré mi teléfono con la dirección que mantenía guardada en notas y Jaden asintió con su cabeza mientras entrecerraba un poco sus ojos.

Días antes le había preguntado a DJ sobre restaurantes que fueran lujosos y buenos en Atlanta, y el me dió el dato de un restaurante bastante lindo y novedoso de sushi, el cuál le encantaba a Jaden.

Claramente Jaden se fijó en cuánto estábamos llegando a la dirección de cual restaurante se trataba, hubiera sido ideal que fuera sorpresa, pero como el era el conductor estaba imposible.

-Déjame adivinar, ¿un pajarito?.-dijo Jaden con una sonrisa al estacionar frente al gran restaurante.

-Así es, pero este pajarito es diferente.-me encogí de hombros y él rió.

-Al menos son pajaritos colaboradores.-alzó una de sus cejas.

-Totalmente.-reí también.

Ambos nos bajamos de la camioneta para caminar hacía la entrada del restaurante, y una vez allí un hombre nos recibió para llevarnos a alguna mesa disponible.

𝐿𝒶 𝓉𝑒𝑜𝓇í𝒶 𝒹𝑒𝓁 𝒶𝓂𝑜𝓇 ~ [𝒥𝒶𝒹𝑒𝓃 𝒲𝒶𝓁𝓉𝑜𝓃]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora