Capítulo 59

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- Pero... ¿Qué coño?

Violeta cerró la puerta al baño y fue hacía Kiki, que aún la miraba sin entender nada. La pelirroja cogió la toalla de manos que estaba al lado del lavabo y se puso detrás de Chiara.

- Apoya las manos en el lavabo. –Dijo Vio. Con la toalla le tapó los ojos.

- Vale. Ya lo pillo.

Kiki sintió como un escalofrío recorría todo su cuerpo. Violeta quería hacer otra recreación.

- ¡Espera! –Chiara se dio la vuelta haciendo que la toalla que le cubría los ojos cayera al suelo.

- No lo...

- ¡Sí, sí! Si lo pillo, sé qué es lo que quieres hacer. Me parece bien, pero creo que deberíamos de innovar un poco. Espera aquí. ¡No te muevas!

Salió corriendo del baño dejando allí a Violeta. Esta vez era ella la que no entendía nada.

- ¡Carol!

La chica estaba bailando en mitad del salón cuando Kiki la abordó y la apartó un poco para poder hablar con cierta intimidad.

- ¿Qué te pasa, maricona?

- Necesito que me hagas un favor. –La chica asintió con la cabeza con curiosidad-. Tienes que ponerte donde el pasillo e impedir que nadie se pare frente al baño.

- ¿Al baño? Sí, claro, ¿Y la gente dónde mea? ¿Por la terraza?

- ¡Hay otro baño! En la habitación de Ruslana, mándalos allí.

- ¿Pero qué vas a hacer? –Kiki enarcó las cejas de una manera bastante significativa-. ¡Ay, que cabronas! Mira que sois pervertidillas... ¿Pero iros vosotras al baño de la habitación?

- No, no. Tiene que ser en ese. Es una cosa nuestra...

- Guarrillas pero románticas. Que fantasía. –Kiki le dio un puñetazo en el brazo-. ¡Au! Yo te cubro, aunque seas pelín violenta. Espero que con Violetita seas más cariñosa. ¿Algo más necesita la princesa?

- Pues mira, ahora que lo dices...

Para celebrar el fin de año la chica se había puesto un traje, con corbata incluida, que le sentaba bastante bien. Kiki deshizo el nudo de la corbata negra que la chica llevaba y se la quitó.

- ¡A ver que hacéis! ¡Qué es mi corbata favorita!

- Hasta donde yo sé, es la única que tienes...

- ¡Pues eso, mi favorita y única corbata!

La chica vio como la castaña caminaba de nuevo hacia el baño.

- ¿Kiki qué... -Violeta estaba apoyada contra el lavabo cuando Kiki volvió a entrar al baño y cerró la puerta con pestillo.

- Fui a pedirle a Carol que estuviera un poco atenta de la puerta.

- Ah... Mírala ella que previsora. –Violeta puso sus manos sobre las caderas de Kiki y comenzó a susurrar-. ¿Así qué tú también quieres una recreación?

- Sí, yo también quiero. Pero ya te dije que vamos a innovar un poco.

Con un movimiento rápido la giró, y cuando la tuvo de espalda le tapo los ojos con la corbata.

- ¿Pero qué...?

- Es una corbata, mucho más elegante que la toalla que habías cogido, donde va a parar. ¿Nerviosa?

De no verte nunca másDonde viven las historias. Descúbrelo ahora