Capítulo 60

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- Medio año llevó esperándote. No me hagas estas cosas que ya soy mayor y no puedo perder tiempo.

Carol esperaba a que Chiara saliera de la academia. Habían quedado para comer.

- Lo siento, la clase se me ha alargado un poco. –Contestó Kiki distraídamente.

- ¿Pasa algo? Te he puesto a huevo que me llamarás vieja y no te has ensañado.

- Es que ya me das pena. No quiero ser una abusona. –Kiki esbozó una sonrisa, pero no consiguió convencer a su amiga.

- En serio, ¿te pasa algo? –comenzaron a caminar. La chica negó con la cabeza-. Kiki...

- Es que igual es una tontería. Vio lleva rara unos días...

- ¿Cómo rara?

- No sé, no quiere quedar conmigo. Dice que está incubando algo y después de trabajar se quiere ir para casa.

- ¿Pero ha pasado algo?

- No sé... igual sí. Verás, el día de Nochevieja le dije que me gustaría que se volviera a mudar conmigo.

- ¡No jodas! ¿Y qué te dijo?

- Pues que no quería precipitarse, pero no sé, tampoco me pareció que se lo tomara mal. Es más, hablamos y parecía que estaba contenta. Pero igual lo ha pensado mejor y la he agobiado...

- ¿Pero qué te dijo exactamente?

- Esa noche nada, lo que te dije, que no quería precipitarse pero que me quería. El día 1 desayunamos y todo parecía normal. Íbamos a comer juntas, pero después de darse una ducha decidió irse. De repente tenía prisa y estaba esquiva, y lleva tres días sin querer verme. Dándome excusas.

- Qué raro... Con lo clarita que es normalmente Violeta. Deberías de ir a hablar con ella.

- No me quiere ver.

- Da igual. Te plantas delante de ella y que te diga lo que le pasa. Igual es una tontería y os estáis montando una película. No la puedes obligar a hablar contigo, pero insiste un poco. Por teléfono es más fácil ignorarte, pero en persona sabrás si le pasa algo. Venga, ve ahora. ¿Está en el bar?

- No, ahora no. Entra después de comer. Le dije que si quería iba a comer con ella, pero dice que no se encuentra bien, que está metida en la cama.

- ¡Pues venga, ve hasta su casa!

- No sé, Carol...

- Hazme caso a mí que soy más vieja y sabia.

- No, si lo de vieja está claro. Lo de sabia ya...

- ¡Esa es mi chica! Te veo mucho más animada.



Después de comer algo rápido con Carol había decidido hacerle caso a su amiga y estaba llegando al piso de Violeta. Podían tomarse un café y la acompañaría al bar. No podía dejar de pensar que algo iba mal, aunque no entendía el qué, ni porqué Vio no era clara con ella.

Ya estaba casi llegando al portal cuando la vio bajarse de un coche. Era el de Julia. Vio se fue al portal y esperó a que la gaditana terminara de aparcar. Kiki se quedó quieta, sin acercarse a las dos chicas. Cuando Julia por fin terminó, se bajó y fue hacia el portal. Al acercarse la pelirroja se lanzó a sus brazos, y así estuvieron durante unos segundos, abrazadas en el portal, con Julia acariciándole la cabeza y dejándole un beso en la frente al separarse para entrar de la mano por la puerta.

De no verte nunca másDonde viven las historias. Descúbrelo ahora