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Escuché que usaron hechizos de matriz para construir este lugar, pero... Mis orejas y mejillas heladas cosquillearon con el suave calor tan diferente del clima de afuera. Me froté las mejillas y caminé a través del campo aturdida.

El Salón Changgoong era el salón de entrenamiento aislado del clan Namgoong. Para ser más precisos, era un lugar construido mediante los esfuerzos combinados de los clanes Namgoong y Jaegal.

Uno de los diez grandes clanes, el clan Jaegal era una casa sin rival en su posición. Sus técnicas de artes marciales eran excepcionales, por supuesto, pero eran sus mentes estratégicas las que hacían que el clan se destacara. Era seguro decir que sin el clan Jaegal, no habría habido una Alianza Marcial. El clan Jaegal jugó el papel más importante en la formación de la Alianza Marcial y la expulsión del Culto Demoniaco Divino. A lo largo de las generaciones, el clan Jaegal ocupó el puesto de asesor de la Alianza Marcial, con el objetivo de ser reconocido como el clan más grande del mundo marcial.

Pero todo eso era cosa del pasado. El clan se había deteriorado mucho con el paso de los años y ahora era incluso más pequeño que el clan Baengri en términos de tamaño. Había llegado al punto en que ya no debían considerarlo uno de los diez grandes clanes, pero como dice el dicho, los ricos nunca se arruinan. Gracias a la sólida imagen que habían construido con el paso de los años y al carácter distintivo del clan, la gente seguía contando a Jaegal entre los diez grandes clanes a pesar de su deterioro.

De todos modos, fue ese mismo clan Jaegal el que había cooperado en su mejor momento con el clan Namgoong para construir el Salón Changgoong. La brisa tranquila y la sensación de hierba y tierra bajo mis pies se sentían demasiado claras para ser una ilusión. Había habido una escena en la novela en la que Namgoong Ryuchung se encontró atrapado en una formación establecida por el Culto Demonio Divino. En un momento estaba con sus compañeros, luego de repente había sido arrojado a un pozo y atacado por monstruos de leyenda, dejándolo herido. Supongo puedes hacer algo tan salvaje como eso, definitivamente podrías construir algo como esto también.

Me detuve junto al lago y sumergí mi mano en su superficie ondulada. Parecía agua real. Qué asombroso. Cerré los ojos y me concentré por un momento. Cuando volví a abrirlos, pude ver mis ojos dorados reflejados en la superficie del agua. Mis ojos definitivamente habían estado cerca de un marrón brillante cuando los estudié en el espejo después de que Seo Haryeong los notara por primera vez, pero cuanto más entrenaba, más dorados se volvían mis ojos, y ahora eran casi de un dorado profundo. Parecía que cuanto más manejaba la fuerza natural, más vívidamente cambiaban mis ojos. No estaba segura de si eso era algo bueno.

Levanté la cabeza de la superficie del lago y miré a mí alrededor. Llámalo fortuna, pero a esos ojos no se les puede engañar. El flujo de la fuerza natural era completamente diferente del hermoso paisaje de esta vista, tan artifıcial que noté la disonancia tan pronto como lo vi.

Y lo más importante, la fuerza natural estaba mucho más concentrada aquí, como era de esperar de un lugar hecho para entrenar. Definitivamente sería más rápido aumentar tu qi interno si entrenaras en un lugar como este. Me senté en un tocón en la posición de loto y comencé mi circulación de qi. La posición de loto en realidad no era necesaria, ya que no podías considerar realmente que lo que estaba haciendo era circulación de qi, pero sentarme de esa manera parecía ayudarme a concentrarme un poco mejor.

Como siempre, evalué la cantidad de fuerza natural que podía manipular y luego comencé a reunirla lentamente en mi mano derecha. Pronto, la herida en mi palma comenzó a picar insoportablemente. Era una señal de que mi herida se estaba curando rápidamente.

La capacidad de curación de los artistas marciales con un fuerte qi interno era mucho mayor que la de una persona normal, y yo podía producir un efecto similar utilizando la fuerza natural. Por eso el médico del clan Namgoong quedó impresionado por mi velocidad de recuperación. Podría haberme curado incluso más rápido, pero había bajado el ritmo para no llamar la atención.

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