Yeon

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La puerta se abrió y luego se cerró silenciosamente, y el sonido de pasos ligeros sobre el suelo de piedra comenzó a alejarse. Con los ojos cerrados, Namgoong Mucheol dijo: —Qué buena hija tiene Euigang.

Un hombre salió pisando fuerte de detrás del biombo. —¿De qué estás hablando? ¿Qué quieres decir con que el maestro robó el Elixir Azure de Yeon? —La cara de Namgoong Wan estaba completamente roja de ira, sus vasos sanguíneos sobresalían de su cuello.

—¿No escuchaste nuestra conversación? Es tal como dije.

—¿Es por eso que pediste el Elixir Azure? ¡Dime!

—Sí.

—¡Padre!

—No hay necesidad de gritar, todavía puedo oír con claridad.

Rechinando los dientes, Namgoong Wan pisoteó ruidosamente hacia la mesa y golpeó sus manos sobre ella, el elaborado diseño de carpa y loto incrustado alrededor de los bordes mesa se partió bajo la fuerza.

—¡El elixir, dámelo! —el demando.

—¿Para qué?

—¡Para devolverlo, por supuesto!

Namgoong Mucheol miró a su hijo entrecerrando los ojos. —¿Pensé que querías dárselo a Ryuchung?

—¿Por qué habría? ¿No viste cómo trataba a Yeon en la cena? ¡Un balde de agua fría es todo lo que se merece!

Asintiendo hacia el cojín aún cálido frente a él, Lord Namgoong ordenó: —Siéntate.

—¡Padre!

—¡Siéntate!

Namgoong Wan exhaló con fuerza por la nariz pero se sentó. Namgoong Mucheol chasqueó la lengua mientras miraba a su hijo. —Enfría tu cabeza. ¿Por qué eres tan tonto? ¡¿No has podido aprender la lección que incluso una niña pequeña logró aprender?!

—¿Qué lección? ¿Esa confianza deja paso a la traición? ¡Lo que hizo tu hermano jurado fue...!

Namgoong Mucheol arrojó el contenido de su taza de té a su hijo, quien la esquivó fácilmente pero no pudo evitar que unas gotas salpicaran su ropa.

Sacudiendo su ropa, Namgoong Wan espetó: —Deja de hacer eso cuando no tengas nada que decir!

—¡Lo hice para hacerte entrar en razón! —Namgoong Mucheol dejó escapar un profundo suspiro—. Incluso si le devolvieras el Elixir Azura esa niña, ella no podría soportarlo.

—¿Qué quieres decir?

—Incluso si se lo devolvieras, si alguien más intentara quitárselo, ella no podría detenerlo.

—¡Como si alguien excepto tu hermano jurado se atreviera a levantar la mano contra Yeon cuando está bajo la protección del clan Namgoong!

—¿Cómo crees que supo que ella tenía el Elixir Azure en primer lugar? La noticia de que Yeon salió viva del laboratorio del Médico Divino se está difundiendo rápidamente. Aquellos que conocen el Elixir Azure seguramente también aparecerán. Ya es demasiado tarde para esconder esto debajo de la alfombra.

—¿Por qué me cuentas esto ahora?

Namgoong Mucheol se frotó la frente. —¡Solo han pasado dos días desde que trajiste a esa niña aquí! Si insistes en devolver el elixir, al menos espera que llegue Euigang y dáselo tú mismo. No te impediré hacer eso.

El rostro de su hijo se contrajo. —¿Lo aceptaría? ¡Y ahora mismo Euigang está... si bebiera el elixir ahora mismo, no se sabe qué podría pasarle!